Joel Urribarí, presidente de Canadefu señaló que en algunas estado se inició la reactivación del proceso de funerales en un proceso que han denominado como «Protocolo de Despedida», que permite la participación de un máximo de 13 personas por sala siempre y cuando se use la mascarilla y los guantes.
El presidente de la Cámara Nacional de Empresas Funerarias y Afines (Canadefu), Joel Urribarí, informó que el sector ha solicitado reunirse con el gobierno de Nicolás Maduro para analizar la situación de la pandemia por regiones. Esto con miras a implementar un plan de desescalada por estados.
«Pedí una reunión con el director de salud para ir evaluando en cada estado cómo podemos ir liberando o dando una flexiblización de acuerdo a como esté cada estado, porque no todos están en rojo», dijo en entrevista a Unión Radio.
Urribarrí señaló en algunas entidades se inició la reactivación del proceso de funerales en un proceso que han denominado como «Protocolo de Despedida».
De acuerdo a lo señalado por el representante del sector de las funerarias el llamado Protocolo de Despedida permite la participación de un máximo de 13 personas por sala. Así como también, el uso de la mascarilla y guantes para poder ingresar y permanecer en las instalaciones. Se establecieron solo dos horas de permanencia.
«Estamos permitiendo una despedida, lo que llamamos los protocolos de despedida, para que el familiar pueda tener el último adiós con su ser querido», comentó.
El máximo representante de Canadefu apuntó que algunas de las ciudades del país donde se inició la ejecución de este protocolo son Maracaibo, Barquisimeto, Valencia y Cojedes. Asimismo, dijo que la Cámara aboga para que los actos fúnebres se extiendan hasta por cinco horas.
«Nosotros por ser el último eslabón de la cadena médica no hemos sido afectados, de hecho nuestros trabajadores gozan de salvoconducto para trabajar las 24 horas de ser posible», agregó.
También recordó que los cuerpos de las personas que hayan fallecido por coronavirus deberán ser cremados, tal y como lo ordena el Ministerio de Salud. Mientras que en casos como Barinas y Acarigua, en Portuguesa, donde no cuentan con las condiciones para llevar a cabo este proceso, se debe inhumar el cadáver.
En este momento no se trasladan cuerpos de una región a otra, por lo que la persona debe ser enterrada en el estado donde ocurrió el deceso.
Urribarrí instó al Ejecutivo permitir que las funerarias surtan sus vehículos de gasolina al menos cada dos días, debido a las dificultades que se han presentado para trasladar a los difuntos a los cementerios.
Con informaciòn de Tal Cual