Ecuador y Bolivia sorprendieron al abstenerse en la última votación de la Organización de Estados Americanos (OEA) que aprobó la convocatoria de una reunión de cancilleres, el próximo 31 de mayo, para definir acciones a tomar sobre la crisis del país sudamericano.
Luego de la abstención de la delegación diplomática, el presidente saliente de Ecuador Rafael Correa manifestó que la crisis venezolana debe resolverse con diálogo, pero también por medio de elecciones.
La fuerza de la presión internacional
Esta posición de “cautela” que asumen los aliados tradicionales de Venezuela refleja que el gobierno perdió su capacidad de aglutinar apoyo internacional, en opinión del internacionalista Luis Daniel Álvarez.
“A Venezuela le quedan pocos aliados. Correa ha dicho que deben hacerse elecciones para solucionar la crisis y esto lo que revela es que los países de la región se están dando cuenta de que retratarse con el gobierno venezolano es perder la posibilidad de acuerdos con otros países; el Salvador, por ejemplo, depende de las remesas que envían desde Estados Unidos (que mantiene una postura muy crítica contra el gobierno de Nicolás Maduro)”, señaló el analista.
Recuerda que la presión internacional socavó las bases de la dictadura de Alberto Fujimori, en Perú. “La presión internacional hizo que los aliados de Fujimori le dieran la espalda, que los países comenzaran a distanciarse y eso aceleró la salida del dictador”, apuntó.
El profesor universitario manifestó que la presión internacional que se ha generado contra el gobierno de Maduro solo es equiparable con la promovida contra la dictadura de Anastasio Somoza, en Nicaragua, o el régimen racista del apartheid en Sudáfrica.
El error de salirse de la OEA
El internacionalista Juan Francisco Contreras atribuyó la “alerta internacional” no solo a la agudización de la situación de conflictividad social en Venezuela sino a las decisiones, a su juicio, erradas del gobierno al decidir salirse de la OEA.
“Ni siquiera las peores dictaduras, como la de Pinochet, decidieron salirse de algún organismo internacional para tratar de guardar las apariencias”, dijo.
Contreras añadió que “Venezuela se encuentra al margen del derecho internacional y la presión de los organismos multilaterales tiene un efecto de aislamiento. Al gobierno se le va a hacer más difícil conseguir créditos para paliar la crisis económica si no busca una salida inteligente y negociadora”, concluyó.
Fuente: Efecto Cocuyo
Fecha: 21 de mayo de 2017