Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas, junto a otras líderes del movimiento presentó un documento ante la vicepresidencia de la República solicitando que el salario se eleve a 120 dólares.
Representantes de 25 organizaciones que representan a los enfermeros venezolanos protestaron ante las puertas de la vicepresidencia de la República este miércoles, exigiendo aumento de sueldo.
Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas, informó que, junto a otras líderes del movimiento, consignó ante el despacho de la vicepresidencia de la República un documento en el que se exige que el aumento sea de 120 dólares.
“En el documento exigimos el incremento del salario a los enfermeros a 120 dólares al mes o su equivalente en bolívares, o 2,5 petros», expuso.
«Es lo justo, pues no tenemos ningún tipo de incentivo en nuestro trabajo. No tenemos insumos médico quirúrgicos, medicinas, equipos de bioseguridad anticovid, uniformes. Además, en la mayoría de los centros de salud en donde laboramos hay escasez de agua y la higiene no puede mantenerse, con lo que corre riesgo la vida de nuestros agremiados”, añadió.
Contreras indicó que en algunos hospitales se está pagando en efectivo un «bono-covid» por un monto de 100 dólares al mes al personal que trabaja en áreas críticas. Al respecto, señaló que debe ser para todos.
Es un derecho que tienen los trabajadores de la salud de Venezuela de aumentar sus remuneraciones. Estamos de acuerdo con ese pago de un bono de 100 dólares, pero también queremos que se extienda a todos los enfermeros y al resto del personal de la salud. El covid no solo está en las áreas aisladas, está en todas las salas de los centros de salud», expresó Contreras.
La líder del gremio de enfermería advirtió que de no haber una pronta respuesta a los requerimientos se producirán renuncias masivas.
«Las 25 organizaciones gremiales que agrupan a los enfermeros de Venezuela nos veremos obligados a renunciar al trabajo en el sector público. No podemos seguir ganando el equivalente a 20 dólares por mes o menos», dijo.
Y añadió: «Nuestra gente ha emigrado, ha hecho trabajos en paralelo a su labor en el sector público para poder sobrevivir. Exigimos al Estado que es el que maneja la nómina del sector público, que ajuste los ingresos o nos veremos en la obligación de renunciar a nuestros puestos de trabajo. Hay quien no tiene ni pasaje, ni comida, ni uniformes para poder acudir a su trabajo, esto se tiene que terminar».
Con información de Versión Final