Los usuarios de la ruta no confían en la policía regional para denunciar este tipo de abuso ni tampoco cuando deben pagar el pasaje en dólares, obligados a aceptar el cálculo en bolívares siempre por debajo de la tasa fijada por el BCV.
Luego de más de un centenar de días de la cuarentena por el coronavirus (COVID-19), decenas de pasajeros de la ruta Caracas-La Guaira denuncian que se ven obligados a cancelar hasta 60.000 bolívares para desplazarse hasta la capital.
Los afectados aseguraron que desde antes del confinamiento los conductores de las unidades no respetaban la tarifa de 15.000 bolívares que establece la Gaceta Oficial número 6490, publicada el 22 de noviembre de 2019. Por estos días, solicitan entre 50.000 y 60.000 bolívares de pasaje en efectivo.
“Eso depende de la hora y del día. En las tardes, por ejemplo, se aprovechan y piden los 60.000 bolívares, como si fuera tan fácil tener esa cantidad, cuando los bancos recién están abriendo en las semanas de flexibilización”, comentó Teresa Alcántara, que esperaba abordar un autobús en la parada del distribuidor El Trébol en Maiquetía.
Si bien las colas en las paradas de la ruta han disminuido en la cuarentena, la ausencia de fiscales en las distintas líneas facilita el cobro excesivo del pasaje.
60.000 bolívares
La ausencia de fiscales facilita el cobro excesivo en el transporte. Foto: Rafael Lastra Veracierto
Para muchos usuarios, la denuncia formal de esta irregularidad no es una opción viable, dado que se presume la complicidad de los policías regionales y municipales, que esporádicamente vigilan los sitios en motos y vehículos institucionales.
En el recorrido de Crónica.Uno por varias paradas de la ruta Caracas-La Guaira, se constató que a la mayoría de los pasajeros que aborda las unidades no se les exige el uso del tapabocas, pero sí la cantidad extra a la tarifa vigente: es decir, entre 50.000 y 60.000 bolívares de pasaje, que en el último caso equivale a cuatro veces más del pasaje autorizado por el Ministerio de Transporte Terrestre.
Los choferes no han sido solidarios con el pueblo en esta situación. Es verdad que muchas veces no viajan con todos los asientos ocupados, pero tampoco pueden abusar así de nuestra necesidad de ir a trabajar”, dijo Ricardo Escalona, quien labora una vez a la semana en un banco del centro de Caracas.
Bien valen verdes
Cuando los usuarios no poseen moneda nacional, los conductores reciben el pasaje en divisas, al calcular el dólar estadounidense en 160 bolívares, por debajo de la tasa oficial del Banco Central de Venezuela (BCV).
Lo peor es que si te queda un cambio, se ponen cómicos para darte el vuelto en bolívares. Como quiera que sea, sales perdiendo”, indicó Federico Robles, trabajador de una aduanera en el puerto de La Guaira y que vive en Catia.
Mientras, en los dos terminales terrestres de la entidad federal, en Catia La Mar y La Guaira respectivamente, se observó la presencia de fiscales y el cobro del pasaje a 40.000 bolívares.
Cuando se recordó a un fiscal del primer terminal que la tarifa vigente era de 15.000 bolívares por persona, señaló que “está desactualizada con lo que vivimos”.
Sin identificarse, por temor a represalias políticas, agregó que había un acuerdo con los conductores para cobrar 25.000 bolívares más.
No informó si el pasaje hacia Caracas será incrementado en las próximas semanas por el gobierno nacional, a lo cual aspiran los conductores, quienes han manifestado las dificultades económicas para mantener operativos los buses del servicio público.
“Perdemos en las colas para surtir de combustible nuestras unidades”, manifestaron los choferes.
Con información de Crónica Uno