En octubre próximo se cumplirán dos años completos de la hiperinflación en Venezuela y dos de sus consecuencias son patentes en la economía: el cierre de locales comerciales y la caída del consumo. En especial cuando se pone el foco en el interior del país.
El estudio más reciente de Nielsen Venezuela mostró la clausura de 31% de los locales comerciales, cuando se compara 2017 con 2019. La muestra reflejó, además, que Valencia fue la ciudad en donde hubo el decrecimiento más amplio de puntos comerciales con 38%. Estos niveles de desaparición de negocios también se palparon en la región del centro, el occidente y los andes con un promedio superior a 30%.
“Esta es la primera vez en la historia de Venezuela que hay unos niveles tan altos de cierre de establecimientos en nuestro reporte”, expresó Alexander Cabrera, gerente general de Nielsen Venezuela.
Caracas tampoco escapó de la tendencia de cierre de locales comerciales, aunque se mantuvo muy por debajo del promedio nacional. La capital solo enfrentó la clausura de 17,4% de sus puntos de venta.
Las razones que explican esta desaparición de negocios son variopintas. Algunas carnicerías se vieron afectadas por el racionamiento eléctrico en las regiones y tuvieron que enfrentar la pérdida de equipos que no pudieron reponer, mientras que las farmacias lidiaron con la incapacidad de comprar un lote de productos importados. Mientras que todos afrontaron dificultades para aceptar los pagos con tarjetas de débito y de crédito por la intermitencia en la conexión telefónica.
“Es la sumatoria de todo. El mayor driver del cierre de los puntos de venta es que el canal tradicional no supo lidiar con la hiperinflación. El tema de la recompra. Hubo negocios que compraban 100 ítems de equis producto y al momento de volver a comprarlos ya no tenían el capital, porque el precio incrementó tanto que no tenían el capital para pagarlos”, explicó Cabrera.
La falta de experticia para lidiar con la hiperinflación afectó a: los quioscos (-50,6%), abastos (-31,1%), licorerías (-26,2%), tiendas para mascotas (-24,6%), farmacias y perfumerías (-23,9%), minimercados (-16,6%) e incluso, a panaderías (-15,3%).
Con información de Efecto Cocuyo