El Hospital Psiquiátrico Dr. Francisco Sotillo Liscano, ubicado en el sector Mesa de Gallardo, en el municipio y estado Trujillo, está colapsado. El diputado de la Asamblea Nacional, Emilio Fajardo,  lo constató cuando acudió al llamado de varios familiares de los pacientes y trabajadores de la institución.

En la visita se encontró con la médico Ledys Mata, quien en calidad de especialista le contó las deficiencias de este centro de salud. Explicó que el centro no tiene camas para hospitalización, no tienen comida y tampoco medicamentos para sus pacientes, la mayoría de escasos recursos económicos.

De una capacidad para 20 personas, la institución solo alberga a seis, debido a que hay una negativa por parte de la dirección para recluir a nuevos pacientes. La doctora había pedido en reiteradas ocasiones que le pasaran un informe por escrito de esta medida, pero no se lo daban.  Una manera de seguir ocultando la decadencia de la organización dependiente de la Fundación Trujillana de la Salud.

“Estuvimos viendo el estado de emergencia en el cual se encuentra ese hospital y, por supuesto, sus pacientes. Físicamente las instalaciones están en franco deterioro. No hay medicamentos adecuados, las instalaciones para hospitalizar a estos pacientes no están en condiciones óptimas. Además, los familiares no tienen los recursos para poder cancelar los medicamentos que son de alto costo. El trato por medio de la directora de este organismo ha sido el de vejar tanto a la doctora especialista como a los familiares. Los trata de manera inadecuada, no le da información sobre los insumos, los medicamentos que se requieren. Simple y llanamente les están diciendo que se lleven a sus pacientes”, relató Fajardo.

Violación de Derechos Humanos

Testimonios de trabajadores y allegados a la doctora Mata, quien fue detenida el jueves 21 de febrero, por las Fuerzas Armadas Policiales del estado Trujillo, contaron que ella se preocupaba por sus pacientes. Muchas veces tuvo que negar, sin querer hacerlo, la hospitalización a personas con cuadros de depresión y trastornos severos. En una oportunidad, dieron de alta, sin su consentimiento y criterio médico, a una señora, quien al salir asesinó a una nieta.

Fajardo expresó que la doctora fue detenida simplemente por cumplir con su deber y apegarse a su vocación. Una acción arbitraria y violatoria de sus derechos. “Hubo represalias en contra de quien ha hecho su trabajo, por su sensibilidad de hacer la denuncia ante los organismos correspondientes, en este caso la Asamblea Nacional. Ahora se nos está advirtiendo que será procesada por instigación al odio; ella no está instigando al odio, ella está buscando la manera de salvarle la vida a muchos de los pacientes que están ahí para buscar la solución a sus problemas de salud”, contó.

Advertencia

El diputado llamó al director de la policía, Orlando Villegas, a que se apegue a la Constitución y las leyes, pues –a su juicio- esta violación a los derechos humanos no va a quedar impune.

“No le tenemos miedo, no tenemos temor, porque estamos asumiendo nuestro compromiso con el país. No va a valer la amenaza que usted haga. Vamos a seguir denunciando las irregularidades que cometan los órganos del poder. Son pocos días los que le queda de esta dictadura en Venezuela”, sentenció Fajardo, quien por último responsabiliza al funcionario de lo que pueda ocurrirle a él o a su familia.

Con información de El Pitazo.

Ir a la barra de herramientas