Human Rights Watch (HRW) criticó en su informe anual la situación de los derechos humanos en Venezuela, Brasil, México y Nicaragua, y aseguró que el mundo vive “tiempos oscuros”, aunque la “resistencia” está “cobrando fuerza” en las instituciones y en la calle, especialmente en América Latina.
El director ejecutivo de HRW, Kenneth Roth, aseguró en una entrevista a Efe que decir que el autoritarismo cotiza “al alza” no es contar toda la historia y que en el subcontinente se han registraron “importantes buenas noticias” el año pasado, como la condena al “desastre” de Venezuela, abanderada por el Grupo de Lima.
Tildó de “avance” la actuación de estos “actores inusuales” que, “quizá” por la ausencia de EEUU, se atrevieron a llevar la cuestión de las violaciones de los derechos humanos en Venezuela y Nicaragua a la arena internacional y lograron sacar adelante sus condenas.
El informe, presentado en Berlín, dedica un espacio importante a Venezuela -empezando por la foto de portada con opositoras sosteniendo velas en una vigilia- y lamenta el “enorme coste humano” de mantener a un autócrata en el poder, con la consiguiente “hiperinflación y devastación económica”, así como la falta de comida y medicinas, que han hecho que “millones huyan del país”.
“Las crisis política, económica, humanitaria y de derechos humanos en Venezuela se combinan para animar a los venezolanos a marchar y hacerles imposible la vuelta. Algunos podrán obtener el estatus de refugiado. Otros no pero afrontarían serias dificultades si regresasen a Venezuela y necesitan urgentemente asistencia humanitaria en los países a los que han emigrado”, afirma el documento.
Con información de El Estimulo