HRW alertó que actualmente en Venezuela no puede enviarse un mensaje por WhatsApp para criticar a Maduro sin temor a persecución
El director para las Américas de la ONG Human Right Watch (HRW), José Miguel Vivanco, denunció este viernes que la administración de Nicolás Maduro ha usado la crisis del covid-19 como «una excusa para reprimir voces disidentes e intensificar su control férreo sobre la población».
«El estado de excepción ha hecho que las fuerzas de seguridad y los grupos armados partidarios del gobierno, que ya cuentan con un récord deplorable de torturas y ejecuciones extrajudiciales, sientan que tienen la facultad de reprimir con mayor ferocidad a los venezolanos», expresó Vivanco.
Indicó que desde que se decretara a mediados de marzo el estado de alarma en Venezuela para combatir la crisis del covid-19, se han producido arrestos de forma arbitraria por los cuerpos de seguridad del Estado y posteriormente procesados por la justicia de nuestro país como periodistas, opositores y abogados especializados en DDHH.
“En la Venezuela de hoy, no es posible siquiera compartir un mensaje privado via WhatsApp en el cual se critique a los incondicionales de Maduro sin temor a convertirse en objeto de persecución penal”, manifestó el director de HRW.
Según los números que maneja la ONG, resultado de un análisis de casos que se reportaron por otras organizaciones y en los medios de comunicación, se contabilizaron 162 casos de personas que habrían sido víctimas de hostigamiento, detención o persecución penal en los primeros cuatro meses de cuarentena, además de haber sido acusadas de «incitación al odio» tras compartir información en las redes sociales en las que se cuestionaba a funcionarios públicos o se criticaban políticas públicas.
En los operativos, los efectivos de los cuerpos de seguridad también han confiscado teléfonos celulares y computadoras portátiles de periodistas, a quienes han obligado a borrar fotografías o grabaciones de video.
Reportaron además que esas personas sufrieron abusos, incluyendo agresiones verbales y físicas, golpizas y haber sido esposados por períodos prolongados.
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La Comisión del gobierno interino para los Derechos Humanos y Atención a las Víctimas registró 162 ataques contra periodistas y trabajadores de la prensa, perpetrados por funcionarios de los cuerpos de seguridad del Estado y grupos colectivos, durante los primeros seis meses del año 2020.
De esta cifra, 85 casos ocurrieron tras el decreto de estado de alarma, anunciado por el régimen de Nicolás Maduro, luego de los primeros casos de covid-19 a mediados de marzo.
En una rueda de prensa el 26 de agosto, el comisionado Humberto Prado detalló los ataques y agresiones de los que han sido víctimas periodistas y trabajadores de la prensa, quienes han sido amedrentados, detenidos ilegalmente y sometidos a desapariciones forzadas, lo que incurre en serias violaciones de derechos fundamentales, principalmente, contra el derecho a la libertad de expresión.
Por otro lado, Cofavic registró al menos 100 presuntas agresiones contra personas y organizaciones defensoras de los Derechos Humanos durante los primeros seis meses de este 2020.
Este reporte solo deja en evidencia que la violencia, hostigamiento y medidas arbitrarias en contra de las ONG y sus equipos durante lo que va año, se ha venido agudizando, rebasando incluso el total de casos del 2019, que cerró con 84 registros.
Con información de Tal Cuál