La venta de carne en el Mercado Municipal de San Cristóbal ha disminuido en 80%, de acuerdo a vendedores del lugar, quienes indicaron que el alto costo del insumo no le permite al venezolano consumir proteínas, por lo que han tenido que recurrir a la venta de huesos, recortes, patas de pollo y vísceras, para mantener los negocios abiertos.
Negocios que anteriormente lucían repletos de todo tipo de carne y pollo, ahora ofrecen al consumidor pocas cosas, pues sus dueños aseguran que prefieren comprar en cantidad lo que saben que ahora busca el tachirense, lo más económico.
Randy Leal es vendedor de carne y pollo. Relató que la venta ha disminuido por la porción que se lleva la persona, antes adquirían dos kilos de carne, pero ahora compran medio kilo de guisada y medio de molida.
“Antes se llevaban la porción de quince días, ahora se llevan la de dos días. Compran lagarto, paleta, las vísceras, la carne de cabeza. El hueso se vende tres kilos en 10.000 bolívares y eso les sirve para hacer sopas y rendir, ya no alcanza el sueldo del consumidor y uno por eso también se ve obligado a cambiar lo que vende”, expresó.
Jacob Jaimes es consumidor. Indicó que compra en el mercado municipal porque la pechuga está en 30.000 bolívares y en los supermercados a 50.000. Aunque ha disminuido el consumo, intenta comprar mensualmente para mantener a su familia medianamente alimentada.
Con información de El Pitazo