Para la elaboración de toallas sanitarias, protectores diarios y de hisopos de algodón, la empresa comercial depende de las divisas aprobadas por el gobierno para adquirir los insumos necesarios.
En el caso de las toallas sanitarias, marca Stayfree, se agotó el material super absorbente que se importaba de Japón y la producción se detuvo el 24 de febrero.
La capacidad instalada de estas líneas de producción de toallas sanitarias es de 1,6 millones de unidades al día.
Empleados de Johnson & Johnson señalan que fabricar un paquete de 32 toallas cuesta en promedio unos 4.000 bolívares, pero deben venderlo a un precio regulado de 400 bolívares.
“Lo más asombroso es observar cómo se consiguen paquetes de toallas sanitarias en negocios y hasta buhoneros de Valencia, que sobrepasan los 6.000 bolívares, y son marcas importadas. Entonces, es incomprensible lo que ocurre, no hay control de precios para los productos importados”, indicó una fuente en la planta de Johnson & Johnson.
Protectores e hisopos
Guevara también precisó que para los protectores diarios, marca Carefree, necesitan un tipo de perfume que agregan al algodón. Dijo que al día pueden sacar al mercado unos 3 millones de protectores, cuyo precio no está regulado por el gobierno.
La otra línea de producción que funciona en esta fábrica es la de hisopos de algodón, marca Cottonetes, que estuvo detenida por cinco días y se reactivó el jueves.
En la planta, ubicada en la carretera Nacional Valencia-Los Guayos, hay 290 trabajadores que laboran en tres turnos diarios. Mientras dura la paralización, solo convocan a dos turnos por día, para asistir a entrenamientos y en algunos casos hacer mantenimiento.
Ninguno de los empleados ha sido suspendido laboralmente, todos continúan recibiendo su salario, bonos y beneficios adicionales, indicó Guevara que lamentó que esta situación afecte aún más a los consumidores que verán escasear más estos productos.
Las paralizaciones de estas líneas de Johnson & Johnson se suman a otras como las de Colgate Palmolive, también en Valencia, cuya producción de jabones de tocador se detuvo y la de pasta dental lo hará la próxima semana.
Se trata de insumos para el aseo y cuidado diario que, junto a los alimentos regulados, se ha vuelto un calvario encontrar en los anaqueles del país.
Fuente: El Estímulo
Fecha: 11 de marzo de 2017