La venta de productos detallados en Venezuela llega a niveles inimaginables hace apenas unos meses atrás. Desde cigarros hasta licores se comercian así.

Debido a la inflación y al alto costo de alimentos, artículos de higiene personal y limpieza, se incrementó la venta al menudeo o téticas tanto en urbanizaciones y sectores populares.

Lo que antes se vendía en paquetes de más de uno, ahora se vende por unidad como los cigarrillos o un rollo de papel toilette.

Alicia Arreaza indicó que por el sector donde vive está muy difundida la venta de productos por “teta” o gramos en una bolsita. “Las bodegas y buhoneros de mi barrio venden tetas de café, azúcar, sal, aceite, harina de trigo, leche en polvo”.

Comentó que cuando eso empezó llenaban la teta, “ahora le echan menos y la ponen espaturrada que al alzarla lo que tiene es un fondito. Las cosas las venden así porque la gente no tiene real para comprar un kilo o medio kilo. No alcanza el sueldo y optan por eso”.

Precisó que la venta detallada “empezó hace como cuatro años. Se acentuó con la pandemia en los barrios porque la gente lleva meses sin trabajar, ni bajar del barrio a la parte baja de La Vega”.

Por su parte, Karen Rivas señaló que se comercializa en pequeñas cantidades “aceite, azúcar, sal, café, productos de limpieza por litro o medio litro”.

Aseguró que “en los pueblos es donde más se ve, en Maracay venden aliños licuados, no es salsa, son licuados para hacer carne molida, lo vi. Allá también venden champú en bolsita”.

Manifestó que este tipo de venta “es por la economía, la gente no tiene dinero suficiente para solventar en el momento, esa venta por poquitos comenzó en el año 2018 y ahora aumentó en 80%”.

Marlene Pariata señaló que “ahora se puede comprar un pañal, una toalla sanitaria, un huevo, un cubito. El papel toilette se vende por unidad, antes uno compraba cuatro rollos”.

Agregó que tanto el café en polvo como el aceite comestible se consiguen en pequeñas cantidades, lo necesario como para solventar por pocos días. “El litro de aceite es caro, cuesta $2,5 o Bs 4 millones 900 mil, por teta es más barato”.

Pariata coincide con otros consumidores al señalar que la gente hace ese tipo de transacciones por la hiperinflación que existe en el país, “no alcanza el salario y con la cuarentena eso se agravó como 100%”, aseveró.

Otros rubros se venden al por menor y ahora el usuario puede llevar tan solo una unidad.

Eva Klíe afirmó que “ahora venden una afeitadora, una hojilla, los condimentos como el comino, adobo, en papeleticas de Bs 200 mil, cubitos en polvo y cubito como tal en Bs 400 mil, granos como carotas, frijoles, quinchoncho, avena de medio kilo y un cuarto de kilo”.

Destacó que la comida para mascotas también se obtiene por gramos. “La perrarina la venden en una bolsita por $1 en La Vega. Añadió que se consigue manzanilla, bicarbonato, canela, polvo de hornear en bolsitas de 50 gramos y 100 gramos, 10 gramos de clavito de especie”.

Klíe dijo que comercializan todo de esa forma porque “si la gente no puede comprar el kilo, llevan lo que van a utilizar al momento. A veces no tengo plata para el kilo de azúcar y compro Bs 300 mil que es el mínimo que venden”.

Destacó que “con la cuarentena eso se puso peor, aumentó como 60% porque la gente no puede salir y no gana lo suficiente para comprar esas cosas, con el sueldito”.

Mery Piña dijo que “todo se compra por poquitos porque uno no tiene real. Ahorita venden de todo lo que se consigue. Mantequilla por gramos, jabón en polvo en tetas de 100 gramos y 150 gramos, depende de lo que uno pueda pagar, desinfectante en potecitos chiquitos de agua mineral, un cuarto de litro de lavaplatos. Ahorita si uno compra una cosa no compra la otra”.

Licor.
Luís González afirmó que el licor lo venden en puestos en las calles de Catia, “tienen botellitas de licor de baja calidad como cocuy, ron y caña blanca. Lo dividen en botellitas de agua mineral chiquiticas, tienen una medida por precio y un embudo”.

Comentó que por el sector, “en la esquina de la panadería La Mansión una señora saca botellas y vende licor en vasitos y botellitas. Si el cliente lleva la botellita le sale más barato”.

Agregó que en las calles venden gelatina para el cabello en teta. “cerca de la jefatura se pone un hombre con galones de gelatina y la vende en vasos pequeños y téticas”.

Higiene.
Mayra Arteaga señaló que “ahorita pesan y le ponen el precio a las cosas por los gramos que vaya a llevar el cliente. Yo no compro así porque lo veo antihigiénico porque soplan las bolsitas o mezclan la leche”.

“La gente compra de esa manera porque no tiene dinero, para economizar, una bolsita de café Fama de América cuesta Bs 1 millón 400 mil y la teta vale casi igual”, dijo.

Con información de 2001

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