Monitor Salud, que desde el inicio de la pandemia lleva la cuenta de 16 hospitales del área metropolitana en cuanto a dotación del suministro de insumos y de los equipos de bioseguridad; le responde al mandatario de manera práctica que eso es, en parte, porque en siete de 16 hospitales del área metropolitana no hay guantes y en ocho de 16 faltan los tapabocas.
Hace un par de días el mandatario Nicolás Maduro decía que no entendía por qué los trabajadores de la salud se están enfermando. “No puede ser que tengamos personal de salud y de seguridad contagiado. No, no, no, no aceptemos. Están los guantes, las batas, los tapabocas, los lentes. Están los protocolos de cómo se ponen las protecciones, de cómo se quitan. No acepto ese tipo de debilidades”, señaló en tono de reproche a la comisión presidencial que lleva el control de la pandemia.
Y su vicepresidente, Jorge Rodríguez, también se expresó a modo de sentencia: “Por favor, a todo el personal de salud, de seguridad, a todas las personas que están atendiendo a los connacionales que están volviendo de Brasil, Colombia, Chile, Perú, Ecuador, asuman que están frente a un paciente con COVID-19, atiendan el protocolo, usen el tapabocas. Hemos visto videos, que estamos registrando en cordones sanitarios, de trabajadores de salud que no están usándolo. Que no usan los guantes reglamentarios, que no usan los trajes dispuestos y distribuidos para la atención de estos pacientes”.
Eso lo dijo el 23 de mayo, para cuando sumaba otros cinco casos más de trabajadores de la salud contagiados en la frontera.
Al menos se tiene referencia numérica de 15 mujeres y 20 hombres, 35 en total, de los cuales se han ofrecido muy pocos datos geográficos en estas dos últimas semanas.
La cifra que se maneja ahora no ha sido discriminada, pero hace presumir que son los contagios diagnosticados de mediados de abril a mayo. Son enfermeros y médicos venezolanos y de la Misión Cubana, de la cual solo se han nombrado 21 miembros afectados.
No todos enfermaron en los puestos fronterizos, sino que también estuvieron expuestos en la red pública y en el sistema de clínicas privadas.
A propósito de ello, el diputado a la Asamblea Nacional, José Manuel Olivares, médico oncólogo, aseguró que tiene un registro de 44 casos en el personal de salud que no han sido reportados por Maduro.
Citó que hay dos médicos con positivo para COVID-19 en El Tigre, otros cinco y una enfermera en Puerto Cabello, siete galenos en Apure y dos en Barinas.
Destacó que en Mérida hay 11 pacientes con pronóstico positivo, en Vargas siete médicos y una camarera, cinco en Lara, uno en Nueva Esparta, uno en Táchira y dos enfermeros militares que se encontraban en los campamentos de refugiados.
Otra cifra de trabajadores de la salud víctimas del COVID-19 la da Mauro Zambrano, dirigente del sector Salud y vocero de Monitor Salud, quien maneja un registro de 30 trabajadores con el virus.
Precisamente es Monitor Salud, que desde el inicio de la pandemia lleva la cuenta de 16 hospitales del área metropolitana en cuanto a dotación del suministro de insumos y de los equipos de bioseguridad, el que responde de manera práctica a Maduro: los profesionales se están enfermando porque el personal de salud no tiene los equipos de bioseguridad.
Y lo dijo en cifras:
- En siete de 16 hospitales del área metropolitana no hay guantes y en ocho de 16 faltan los tapabocas.
- En 13 de 16 puestos asistenciales reutilizan el tapabocas, en ocho de no hay agua, en 10 de 16 puestos de salud no hay cloro, en 15 no hay detergentes y solo en uno de ese total hay existencia de jabón.
“En algún momento de la llegada de la ayuda humanitaria hubo dotación de insumos, pero las deficiencias han estado durante todo el desarrollo de la pandemia.
De hecho, en la Maternidad Concepción Palacios los mismos trabajadores están haciendo mascarillas y botas. Más de 10.000 han confeccionado y distribuido en varios puestos de socorro.
46.000 toneladas
En Venezuela las autoridades reportaron la recepción de más de 46 toneladas de insumos y equipos médicos como parte de la cooperación con China, que incluyen equipos de protección y pruebas de diagnóstico, entre otros materiales.
En los últimos 10 días ha habido un incremento de casos positivos, según el Gobierno, producto de 45.905 connacionales que han ingresado a través de la zona fronteriza. De ese total, más 500 venezolanos resultaron positivos.
Aún no se ha hablado públicamente de la distribución masiva de mascarillas y de la dotación a los puestos de salud.
La primera quincena de marzo Maduro ordenó el uso de tapabocas, sugirió que los fabricaran y luego dijo que distribuiría ocho millones de este protector.
A la fecha, en el sistema de salud público es un clamor la dotación de los equipos de bioseguridad.
La encuesta de la Comisión de Expertos por la salud da cuenta de que al 20 de mayo en 81,82 % de los hospitales nacionales no había gel antibacterial; en 50 % no había guantes y en 50 % no había tapabocas.
Alerta mundial
Ya en marzo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) había advertido que la grave y creciente interrupción del suministro mundial de equipos de protección personal (EPP) estaba poniendo vidas en peligro ante el nuevo coronavirus y otras enfermedades infecciosas.
Los trabajadores de la atención sanitaria dependen del equipo de protección personal para protegerse a sí mismos y a sus pacientes y evitar infectarse o infectar a otras personas.
Se hablaba de la escasez de suministro de guantes, mascarillas médicas, respiradores, gafas de seguridad, pantallas faciales, batas y delantales.
Sin cadenas de suministro seguras el riesgo para los trabajadores sanitarios en todo el mundo es real”, decía el director general de la OMS, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Según los modelos realizados por la OMS, se calculaba que se necesitan 89 millones de mascarillas médicas al mes para responder a la COVID-19. En el caso de los guantes de examen esa cifra ascendía a 76 millones, mientras que la demanda internacional de gafas de seguridad se situaba en 1,6 millones al mes.
Con información de Crónica Uno