Reconversión monetaria, seis incrementos del salario mínimo y la escasez de alimentos y efectivo. Los efectos de la hiperinflación impactaron en todos los bienes y servicios en el 2018, hasta en el precio de un vaso de café con leche grande.
Un café con leche grande costaba Bs. 30 mil. Desde ese entonces, el precio tuvo aumentos quincenales superiores al 10%.
Un año después, este viernes 4 de enero, Bs.S 700 (Bs. 70.000.000) cuesta un café con leche grande en Caracas. El precio está 10% por encima del monto que registró hace una semana: Bs.S 550 (Bs. 55.000.000). Sin embargo, el incremento interanual es muchísimo más importante. Con la cantidad de dinero que vale la bebida este viernes, podías comprar 2 mil 333 cafés con leche en enero de 2018.
En un año, el incremento del precio del café con leche grande alcanzó 233 mil 233 por ciento. Según datos de la Asamblea Nacional (AN), en el mes de noviembre la inflación diaria se ubicó en 3%, mientras que el anualizado fue de 1.299.742%.
Señalaron que el sector más afectado por la hiperinflación es el que corresponde a los alimentos, cuyos productos subieron su precio en 171%.
Tazas de café en hiperinflación
Aunque el precio del café con leche no alcanzó el monto estimado por los economistas para diciembre de 2018, los efectos de la hiperinflación sobre los precios no son menos graves.
El profesor de la Universidad Metropolitana, Natan Lederman, dijo en 2018 que el precio de las tazas de café con leche llegaría a costar Bs.S 1.000 (Bs. 100.000.000), mientras que el director de la firma financiera Opuntia previó que valdría Bs.S 1.990 (Bs. 199.000.000).
El economista Alejandro Grisanti explicó el aumento acelerado del precio de los bienes y servicios, que solapa a los incrementos salariales, es una combinación que convierte el proceso hiperinflacionario venezolano en uno de los peores de la historia.
Previó que con la hiperinflación, en los próximos cinco o siete meses se deba hacer una nueva reconversión monetaria.
El economista Leonardo Vera comentó que en un mes, el último incremento salarial (decretado el 27 de noviembre de 2018) perderá todo su poder de compra por el ritmo de la inflación. Esta situación es evidente para la ciudadanía, que en diciembre salieron a adquirir lo necesario para pasar su navidad.
“Prefiero comprar corriendo todo esto, porque en un país con hiperinflación no puedes dejar nada para después”, exclamó Margarita Coronel de 35 años.
Con información de Efecto Cocuyo