Al cierre de 2019, al menos 2.600 personas trasplantadas en Venezuela están en riesgo de perder sus órganos debido a la escasez de medicamentos inmunosupresores, alerta la organización no gubernamental Amigos Trasplantados de Venezuela (ATV).

“Ahora 2.600 personas trasplantadas están en riesgo y más del 95 % son trasplantados de riñón. También estamos presentando escasez del medicamento Tacrolimus, que toma más del 50 % de la población de trasplantados”, dijo Reymer Villamizar, director y fundador de ATV.

De acuerdo con el activista, autoridades del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss) aseguraron en septiembre que el medicamento había llegado al país, pero antes de ser distribuido debía ser sometido a estudios para obtener los permisos sanitarios. Sin embargo, luego de tres meses se anunció que no era apto.

“Este 2019 cierra en cifras rojas porque tenemos más de dos años de trasplantes paralizados. En cifras rojas porque el Estado venezolano hace entregas irregulares de inmunosupresores. En cifras rojas porque son más las personas que se complican y no tienen cómo tratarse”, expresó.

Villamizar aseguró que, ante la falta de medicamentos para evitar rechazos de órganos, los médicos migran a sus pacientes a fármacos distintos a los indicados.

Afirmó que han registrado casos en los que las personas desarrollan problemas gastrointestinales, elevación de los niveles de urea y creatinina como consecuencia de esos tratamientos.

“Eso ha generado un aumento en la cantidad de episodios de rechazo”, agregó.

Según el “Informe sobre la privación del derecho a la salud y la vida de las personas con insuficiencia renal en Venezuela”, publicado el pasado noviembre por Amigos Trasplantados y la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y a la Vida (Codevida), al menos 160 personas rechazaron su órgano por la ausencia de inmunosupresores.

El número de fallecimientos de personas trasplantadas desde 2017 hasta noviembre de 2019 era 39. Hasta la segunda semana de diciembre, Villamizar aseguró que la cifra había incrementado a 43.

Prioridades en 2020

Para el fundador y director de Amigos Trasplantados de Venezuela, Reymer Villamizar, en 2020 el Estado venezolano debe dar prioridad a las emergencias por la falta de inmunosupresores y regularizar la entrega de medicamentos en el Ivss.

“La prioridad es atender todas las emergencias que existen por la no entrega de medicamentos. Abordar todas las emergencias por la escasez de inmunosupresores”, destacó.

Villamizar indicó que la reactivación del Sistema de Procura de Órganos y Tejidos (Spot), suspendido desde 2017, es otra de las tareas urgentes en Venezuela. Su inactividad impide que se realicen trasplantes de donantes cadavéricos (persona con muerte cerebral o encefálica).

Según cifras de la Organización Nacional de Trasplante de Venezuela (Ontv), en 2018 se realizaron solo 43 trasplantes de riñón en el país, todos de donantes vivos. Diez años antes, las donaciones cadavéricas de ese tipo superaban las donaciones de personas vivas: se practicaron 178 y 100, respectivamente.

“El Estado debe comenzar, de una vez por todas, a agilizar los trámites para reactivar los trasplantes en el país. Cada día son más las personas en diálisis y la calidad de esa diálisis ha desmejorado”, expresó el activista.

Con información de Efecto Cocuyo

Ir a la barra de herramientas