El oncológico Virgen del Valle en Ciudad Bolívar cumple dos semanas cerrado por falta de aire acondicionado en sus instalaciones, lo que lo pone en un cierre técnico por las imposibilidades de ofrecer el servicio de quimioterapias y consultas en esas condiciones.
El centro es el único en el estado Bolívar que tiene oncología médica, pediátrica y cuenta con el personal médico para atender diversas condiciones de los pacientes oncológicos. Por esto atienden a personas del Oriente del país.
Alberto Cabello, médico oncólogo, explicó que por la falta de aire acondicionado en la sala de mezclas no se pueden preparar las quimioterapias, pues se pone en peligro a la persona que realiza esta labor. La temperatura de estas salas debe ser inferior a 25º centígrados para evitar que el ambiente se contamine.
“Cuando se preparan más de diez quimioterapias en un día son más frecuentes los efectos adversos que ponen en riesgo a las enfermeras que realizan la preparación. Se pueden absorber esos gases a través de la piel y se ponen en riesgo laboral porque tienen algún tipo de intoxicación, hasta desarrollar neoplasias a posterior”, explicó Cabello.
Los aires acondicionados de las salas de quimioterapia funcionan solo a 25 % de su capacidad, pero no es suficiente para cuando están los pacientes, porque, según explica el especialista, el lugar se calienta y aumenta el riesgo de contaminación.
Pacientes pediátricos
El cierre técnico incluye desde hace un año el área de oncología pediátrica, que está cerrada por falta de médicos especializados en esta área.
“Los pacientes deben ser trasladados fuera del país porque esta era la única unidad pediátrica en todo el estado. Los niños son evaluados y trasladados a Brasil o referidos a Barcelona, Anzoátegui, pero no todos tienen los recursos económicos para trasladarse”, señaló el médico.
La cifra de mortalidad asciende por la falta de oportunidades para atenderse. En el centro hospitalario, a principios del 2018, fallecieron unos 30 niños porque no había los suministros para atenderlos.
Los suministros para la aplicación de las quimioterapias tienen que correr, en la mayoría del tiempo, por el bolsillo de los pacientes, y los precios son muy altos para la mayoría de las personas.
Solo un yelco está alrededor de los 4.000 bolívares y una solución -por ciclo requieren unas cuatro- puede costar entre 15.000 y 20.000 bolívares, cuando el salario mínimo está fijado en 40.000 bolívares.
El hospital Ruiz y Páez es el encargado de suministrar los materiales para el oncológico, pero como tienen las mismas deficiencias, no pueden atender la demanda de los dos centros de salud.
Sin radioterapia en el Oriente
En la región Oriente del país había cinco aparatos para radioterapia y el último que quedaba funcionando era el del estado Sucre, que dejó de funcionar hace unas semanas.
Con información de El Pitazo