Juan Pablo Olalquiaga, presidente de la Confederación de Industriales de Venezuela (Conindustria), denunció que las medidas económicas que impuso el Gobierno, a partir del 20 de agosto, han ocasionado aumento de la pobreza y el cierre de empresas.
Indicó que el ajuste salarial, la reforma tributaria y el afianzamiento del control de precios no contemplaron mecanismos para financiar las necesidades de las empresas y en esas condiciones, no han aumentado su producción, lo cual ha generado un círculo vicioso del cual va a ser difícil salir.
“La disminución de los volúmenes de producción se ha traducido en empobrecimiento del consumidor y contracción general de la economía que ha caído en un círculo vicioso en el que hay cada vez menos transacciones, menos ventas, mas empobrecimiento y menos empresas”,explicó el dirigente gremial.
Dijo que el ajuste del salario mínimo a 1.800 bolívares soberanos (Bs.F 180.000.000) incrementó la masa monetaria en 146 %, hasta finales de septiembre. “Eso se va convirtiendo en ausencia de producción, en deterioro, en disminución del poder adquisitivo y en una inflación que sigue subiendo”, aseveró.
Lamentó que las medidas no cumplieron con los objetivos que fueron anunciados, al contrario, “se han traducido en un deterioro mucho mayor de la economía. Además no contemplaban mecanismos para que las empresas pudieran incrementar sus volúmenes de producción, ni mecanismos para liberar la tasa de cambio”.
Con información de Caraota Digital