Menos camas, menos partos y más muertes. Así termina el balance anual de la Maternidad Concepción Palacios. En este ente de salud, hasta el 31 de octubre se habían registrado 5.228 nacimientos, 2.758 menos que en los primeros 10 meses de 2015, en los que 8.046 bebés llegaron al mundo allí.
La principal razón de este descenso es que en mayo, la sala de parto fue cerrada para rehabilitarse y a este 20 de diciembre seguía inoperante, aunque el personal espera que reabra sus puertas pronto. Esa área contaba con 23 camas y desde su cierre, los cupos para atender partos bajaron a seis.
El motivo del cierre fue que el techo, debido a una gran cantidad de filtraciones, colapsó y se vino abajo. Incluso una lámpara cayó en en el pasillo.
Pero los números más alarmantes del año que culmina son los de mortalidad infantil. De esos 8.046 bebés que nacieron, 216 murieron. De todo los nacidos en 2015, fallecieron 165. A pesar de que menos bebés nacieron, las cifras de mortalidad neonatal aumentaron 30.3%.
La mortalidad materna sí disminuyó: este año murieron 13 madres, una menos que las 14 del año pasado.
Entre las principales causas del aumento de mortalidad infantil está la mala higiene que caracterizaba a la Maternidad. Varios aires acondicionados no estaban funcionales, además de que los desechos se acumulaban en el estacionamiento y sufrían de racionamiento de agua. Se dice que la gestión de la dirección actual ha mejorado varios aspectos.
“Se ve más limpia la Maternidad. Arreglaron el techo”, dijo la epidemióloga Gladys Zambrano, explicando que los cambios positivos se deben al cambio de gerencia: el ente de salud tiene director nuevo. El doctor Alí Barrio asumió la dirección hace más o menos un mes.
El problema que persiste es el del agua. Desconocen los motivos, pero varias horas al día no tienen suministro. “No sabemos si el tanque que no funciona o un problema estructural”.
En cuanto a insumos, la situación ha mejorado levemente. En farmacia lo que les hace falta es vitaminas para las mujeres embarazadas y antihipertensivos. En laboratorio, algunos reactivos -como el necesario para la prueba del talón, que se hace para enfermedades no comunes- y tubos. “Los están guardando solo para pacientes hospitalizados”.
FUENTE: EFECTO COCUYO
21 DE DICIEMBRE DE 2016