La noche del miércoles 15 de abril murió Estebany Barrios. Tenía 15 años. Era paciente del servicio de Nefrología del hospital de niños José Manuel de los Ríos, en Caracas.
Era de San Juan de los Morros, estado Guárico, y estaba hospitalizada desde diciembre. Ese mes recibió diálisis, pero su enfermedad empeoró y le impidió dializarse. Cuatro meses después falleció por complicaciones propias de su enfermedad.
A Estebany le gustaba cantar. Era becada de la casa de la cultura Víctor Ovalles de Guárico, según la Fundación para el fomento de la cultura en el estado Guárico, ente que envió condolencias a través de Twitter.
Es la segunda paciente del servicio que fallece en 2020. En enero murió Víctor Pino, de 12 años. Diez niños, niñas y adolescentes murieron en Nefrología en 2019.
Para Katherine Martínez, directora de la organización no gubernamental Prepara Familia, aunque Venezuela esté enfocada en prevenir la expansión del coronavirus, debe atender a las personas con enfermedades crónicas, quienes continúan complicándose y muriendo.
El servicio de Nefrología cuenta con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) desde 2018. Un año antes, bacterias en la unidad de diálisis generaron un brote infecciosos que enlutó a pacientes, familiares y doctores del servicio.
En 2020, el hospital —que ha padecido fallas en el suministro de agua, problemas en los ascensores, ausencia de reactivos y cierre de servicios— ha registrado al menos tres protestas para exigir mejores condiciones de atención para los niños, niñas y adolescentes.
“Aunque la niña muere por complicaciones propias de su enfermedad, esto nos demuestra lo difícil que es tener una enfermedad así en Venezuela”, dice Martínez. “No vemos que el Estado entienda que deben suministrar los medicamentos, insumos, mantenimiento preventivo y correctivo de equipos, reactivos para los laboratorios y banco de sangre y hacer lo que sea necesario para reactivar el programa de procura de órganos”.
En medio de la cuarentena por el coronavirus en Venezuela, algunos pacientes del servicio de Hematología que viven en las afueras de Caracas no han podido trasladarse hasta el hospital por falta de transporte y han retrasado sus tratamientos.
Con información de Efecto Cocuyo