Son pocos venezolanos los que cumplirán con la costumbre de la noche de Año Nuevo caracterizado por el tradicional brindis a la medianoche, comer las 12 uvas durante las campanadas y adornar las mesas con frutos secos y frutas; entre ellas mandarinas y manzanas.
Este ritual festivo decembrino quedó para la historia tomando en cuenta los precios en medio de la voraz hiperinflación que se traga todo ingreso regular de las familias venezolanas.
El precio por kilo de las uvas blancas importadas sin semillas se vende en Bs.S 6.295,00, es decir 139,8% del nuevo salario mínimo nacional fijado por el gobierno de Nicolás Maduro hace pocas horas en Bs.S 4.500.
Para el año pasado las uvas importadas o uvas globo tenían un precio desde 900.000 bolívares fuertes hasta 1.500.000 bolívares fuertes el kilo, lo que equivaldría a Bs.S 9 y Bs.S 15, tras la reconversión monetaria de la moneda que eliminó los cinco ceros al bolívar.
El kilo de mandarina a la fecha, es más accesible al bolsillo de los venezolanos, pues se consigue en supermercados entre Bs.S 130 y Bs.S 150.
Con información de Descifrado.