El diagnóstico que hizo la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios de Venezuela (Fedeagro) en la presentación del Plan País Agroalimentario, en Aragua, fue claro y contundente: “Más de 80% de las familias venezolanas se encuentran en un estado de inseguridad alimentaria y 89% de la población no puede ni siquiera comprar parte de la cesta básica”.

Aquiles Hopkins, presidente de Fedeagro, informó además que en estos momentos la producción nacional y la importación apenas abastece, en el mejor de los casos, 40% de consumo de alimentos.

“Los niveles de escasez se han disparado en la última semana. Hay muy poco en el mercado pero tampoco hay disponibilidad de compra”, agregó.

Para el presidente de Fedeagro, entre las tareas de un gobierno de transición está la recuperación del sector agroindustrial, a través de la democratización del acceso a los insumos y regresando las empresas al sector privado. “Pero también se deben crear políticas que mejoren el nivel adquisitivo del venezolano que ha perdido la capacidad de compra”, añadió.

La crisis energética y ahora las fallas en el suministro de gasolina también han afectado un sector que ya venía con “la pata cojeando”.

“A los problemas que ya teníamos con escasez de insumos para la siembra ahora tenemos la falta de combustible. Desde Los Andes venezolanos hasta el estado Guárico, pasando por el estado Aragua, no hay gasolina ni para nuestros tractores ni para los vehículos para ir a las unidades de producción. Tenemos pocos insumos para sembrar y ahora no tenemos combustible. Si esto no se soluciona en lo inmediato estamos al borde del colapso”, advirtió.

Con información de El Pitazo

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