El nuevo cono monetario que pondrá en circulación el Banco Central de Venezuela a partir del 15 de diciembre incluirá un billete de 20 mil bolívares, en otras palabras, el papel moneda de la más alta denominación en toda la historia del país.

“Evidentemente, esto tiene que ver con la alta inflación existente en el país y, por tanto, la pérdida de poder adquisitivo de los billetes de menor denominación”, expresó el investigador principal de Latinoamérica del Real Instituto Elcano, Carlos Malamud, en una entrevista con El Confidencial.

Malamud añadió que la decisión de introducir un nuevo cono monetario responde a la necesidad del gobierno de tratar de reducir el malestar popular, estimulando el consumo e inyectando dinero.

“El problema es otra vez es el mismo, y es que los billetes de baja denominación lo dificultan”, explicó.

Por su parte, el doctor en Ciencias Económicas y profesor en el Cunef, Juan Manuel López, opinó que la creación de los nuevos billetes son el resultado de “una desastrosa política económica” implementada por “los gobiernos bolivarianos socialistas”.

Más allá de las percepciones personales de los expertos, la creación de un nuevo cono monetario fue una decisión obligada por la hiperinflación y la exorbitante subida de los precios de todos los productos y servicios.

 

“NO SE SOLUCIONA ABSOLUTAMENTE NADA”

En este sentido, el doctor en Economía y director del Instituto Juan de Mariana, Juan Ramón Gallo, explicó que la hiperinflación surgió por la manipulación de la divisa por parte del gobierno.

“El problema de Venezuela ha sido el de imprimir moneda contra ingresos petroleros futuros, es decir, contra la rentas esperadas de la venta del petróleo (…) Venezuela se puso a imprimir billetes con cargo al futuro beneficio de su venta”.

Rallo explicó también que cuando los precios del petróleo cayeron, la situación pasó a ser similar a la “venta de deuda pública de un país insolvente: el mercado empieza a ver que esos ingresos no van a llegar y que esa moneda no va a valer lo que se esperaba”.

La falta de confianza llevó a la caída del bolívar y ésta a su vez a la subida de los precios.

Según Malamud, los nuevos billetes representan un “paliativo temporal” porque a su juicio, Venezuela se encuentra en un espiral económico que seguirá empeorando.

“Si el problema fuese emitir billetes de más denominación, el dinero sería el maná. Pero el dinero representa algo, que es nuestra capacidad de compra y nuestro poder adquisitivo”, apunta López-Zafra. “En vez de pagarme ahora con 20 billetes de 100 bolívares, me pagas con uno de 20.000. ¿Qué he conseguido? Pues que pasado mañana con ese billete de 20.000 compre mucho menos de lo que pueda comprar hoy. No se soluciona absolutamente nada”, concluye el experto.

FUENTE: SUMARIUM / EL CONFIDENCIAL

FECHA: 10 DE DICIEMBRE DE 2016

Ir a la barra de herramientas