En el estado Mérida se registran diariamente apagones que se extienden entre cinco y diez horas, igualmente las fluctuaciones de voltaje no dejan de producirse a lo largo del día, esto ha generado que algunas máquinas de diálisis se dañen y los pacientes renales sean afectados para dializarse.
Algunas máquinas venían presentando fallas por la falta de mantenimiento y con el inestable sistema eléctrico varias se dañaron.
En la unidad de diálisis Diamerca ubicada en la avenida Cardenal Quintero de Mérida, de 16 máquinas solo 13 están operativas, mientras que en el Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (Iahula) de ocho la mitad funciona. “Tenemos dos años esperando que vengan los técnicos de Caracas y no hay respuestas porque no hay los equipos (…) no hay personas capacitadas para reparar las máquinas”, informó Perdomo.
Otro de los pacientes, denunció que las máquinas no cuentan con tensiometro, aunque los médicos les miden la tensión arterial de manera manual. “A mí a veces se me baja la tensión y debe ser vigilada, mientras nos dializamos con un tensiometro le toman la tensión a otros pacientes y así hacen”, reveló al agregar que cada máquina debe disponer de uno de aparatos.
La falta de personal y la dificultad de traslado redujeron el tiempo de atención
Los pacientes renales ameritan estar conectados a las máquinas durante un tiempo de cuatro horas, tres veces por semana para que sea efectivo el proceso de liberación de toxinas, pero, debido a la dificultad de movilización en la región andina por la falta de transporte y la escasez de gasolina, los trabajadores de Diamerca no pueden asistir a sus jornadas y se tuvo que reducir el tiempo de cuatro a tres horas de diálisis y esto genera complicaciones en la salud de los pacientes. “La diálisis para que sea 100 por ciento efectiva debe ser por cuatro”, dijo uno de ellos.
Hasta el momento el Seguro Social ha facilitado los insumos para las diálisis, pero en algunas oportunidades los pacientes han tenido que llevar gasas, inyectadoras, soluciones fisiológicas 0.9, incluso cloro y productos para la limpieza y esterilización de las máquinas.
Con información de Caraota Digital.