Juan Pablo Olalquiaga, presidente de Conindustria, calificó de escandalosa la cifra de 8.000 empresas cerradas en los últimos 20 años, y cuestionó el actual modelo productivo instaurado en el país.
Según una información publicada en el portal de Conindustria, Olalquiaga señaló que “lo alarmante del caso venezolano es que hubo un quiebre, se rompió la cadena del sector industrial, y restablecer los mecanismos que le permiten a un país la fabricación de productos para satisfacer su demanda interna, no es una tarea sencilla de hacer de la noche a la mañana”.
Además citó el caso de 8.000 empresas cerradas en los últimos 20 años, lo cual considera una cifra escandalosa. Sin embargo, la situación no es reducible solo a un número. Se necesita rememorar un contexto para comprender la situación.
El industrial recordó que hace aproximadamente 20 años se podía hablar de un 80% de fabricación con la marca “hecho en Venezuela”. Había una cantidad de empresas, entre las que se contaban unas aceitadas fábricas de hilo, una industria con una atinada capacidad de fabricación de telas, y una experticia indiscutible en mano de obra en ese sector. Hoy el sector industrial en su totalidad trabaja a un 36% o menos de su capacidad.
Precisó que 2016 ha sido un año particularmente difícil para la industria. Destacó que recuperar el aliento de producción de años anteriores es fundamental para aspirar al crecimiento más que necesario.
FUENTE: EL UNIVERSAL
07/09/16