En una especie de “limbo” o “sin rumbo” se encuentran los pacientes que necesitan, en este instante, un trasplante hepático en el Zulia y el país. No existen números oficiales de cuántas personas están dentro de la lista de espera, no solo por un hígado sano, sino porque se reactive de una vez por todas este tipo de cirugías en la entidad.
“Nosotros tuvimos que irnos a Medellín con mi esposo para realizarle el trasplante, porque acá se nos iba a morir y lograr su intervención fue todo un proceso de papeles, dinero, estudios, gastos. Gracias a Dios el Hospital San Vicente de Paúl es maravilloso y su personal es excepcional, y Tulio está bien, sano y feliz. Cada cuatro meses debemos ir a su control, pero lo tenemos con vida”, contó Carmen Villalobos, familiar de un paciente trasplantado.
Las últimas cifras disponibles en Venezuela sobre estas intervenciones quirúrgicas las publicó en 2016 la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en su informe “Las hepatitis B y C bajo la lupa”, y en este documento las estadísticas refieren a los números de 2014 y para esa fecha en el país se hicieron solamente 9 trasplantes, lo que se traduce en 0,04% de las cirugías hechas en la región. “En el 2014 se llevaron a cabo unos 18.100 trasplantes hepáticos en 15 países”, especifica el texto de esta organización.
La presidenta de la Fundación Zuliana del Hígado, Magda Ortiz, aseguró que los trasplantes de adultos en el país están paralizados, mientras que en el caso de los niños están a la espera, porque Fundahígado, en Caracas, tiene el programa “relativamente bueno, aunque hubo una época que estuvo mejor en niños, y lo menciono en pasado, porque el 50% del éxito de un trasplante de hígado depende de los medicamentos que toman los pacientes posterior a la cirugía, que son para evitar el rechazo del nuevo órgano. Además, con los niños existe algo a favor, y es que generalmente quienes donan son vivos, los tíos, padres, hermanos mayores, es decir, existe un donante, situación diferente ocurre con los adultos es sumamente difícil encontrarlo”.
La especialista indica que solo ella en su consulta tiene 15 pacientes que requieren el trasplante. Sin embargo, enfatizó que esta cifra en la región puede llegar a 100, sin contabilizar todos los pacientes a nivel nacional.
“Es difícil ver cómo día a día vienen los pacientes desesperados a la consulta privada o a la que ofrecemos en la fundación, en la Cruz Roja. Porque anteriormente, hacían todos los esfuerzos y se iban a Colombia a trasplantarse con éxito porque en este país están las condiciones dadas; sin embargo, cuando se incrementó la cantidad de pacientes no solo de Venezuela sino del resto de los países, el Gobierno colombiano se blindó con una ley para proteger a sus pacientes. ¿Qué ha pasado con nuestros pacientes?, bueno prácticamente están desasistidos o se van a otros sitios en Latinoamérica, donde no trasplantan tanto como en Colombia”.
La especialista indicó: “No conseguimos dar una respuesta adecuada y nuestros pacientes están muriendo lamentablemente. Nosotros tratamos de mantenerlos estables. Los que tienen muchos recursos, buscan a través de las leyes, con un recurso de amparo, y logran ser trasplantado en Colombia”.
Existen otras personas que buscan como alternativa la ayuda del Gobierno. “Donde los envían para Caracas, allí como no se están realizando trasplantes le van dando largas al asunto, se le coloca en una lista de espera, y en esa lista vemos día a día cómo fallecen nuestros pacientes”.
Según la especialista, los pacientes están viajando hacia Argentina, Brasil, México y Uruguay. En estos países hay programas de trasplantes.
“Quien decida hacerse un trasplante afuera de Venezuela hasta hace un año, en Colombia, en el supuesto que el paciente lograra entrar en el programa debía tener para pagar él de su bolsillo entre 300 mil y 400 mil dólares. Es sumamente costoso”, precisó Ortiz.
El director del Hospital Universitario de Maracaibo (HUM), Samuel Viloria, precisó que los trasplantes hepáticos y renales se van a reactivar en este centro de salud. Estima que para febrero ya puedan arrancar con los renales.
El pasado viernes, el servicio de trasplante hepático del HUM sostuvo una reunión con Viloria y con representantes de la Gobernación. “En la reunión se precisó que para este tipo de trasplante se deben involucrar al Ivss para garantizar los medicamentos que requiere el paciente posterior a la operación, y que debe tomar de por vida; lo segundo es que Fundavene debe suministrar ciertos insumos que solo son manejados por ellos, como por ejemplo una solución que sirve para preservar el órgano y hay que verificar que la tengan. Vamos a garantizar los insumos requeridos para la operación”.
Aseguró que están en la última fase del proceso de licitación.
“Va quedar pendiente una reunión donde el Seguro Social nos garantice que van a recibir ese medicamento. En estos momentos, tenemos aptos 6 pacientes para la cirugía de hígado o trasplante, los van a empezar a llamar para la fase de preparación, porque la semana próxima comienza el ingreso de los insumos al hospital”, indicó Viloria. Dijo que van a iniciar un plan de capacitación de tres meses a un grupo de tres médicos y tres anestesiólogos en este tipo de intervención, como personal de relevo. Los pacientes que requieren trasplante de hígado en Venezuela en su mayoría son por presentar cirrosis hepáticas crónicas. Las causas de cirrosis son variadas, pueden ser una hepatitis B y C crónica, alcohol, pacientes que pueden tener una enfermedad grasa del hígado de origen no alcohólico, pero en nuestro país lo más frecuente son pacientes por alcohol y enfermedades virales como hepatitis B y C.
Fuente: Panorama
Fecha: 30 de enero de 2017