Usuarios del Paseo Los Próceres se quejan por la falta de un mantenimiento profundo en la estructura, lo que le otorga un aspecto de descuido.
En el Paseo Los Próceres se puede observar a simple vista las paredes «escarapeladas», daños en las luminarias, baldosas resquebrajadas en caminerías, ausencia de tapas en alcantarillas, daños en los equipos del gimnasio al aire libre y un aspecto insalubre del agua en las fuentes.
Para María Armas, asidua visitante al paseo, es visible el deterioro que sufren los espacios debido al permanente uso por parte de los visitantes, quienes en muchas ocasiones no cuidan este patrimonio de los venezolanos. Sin embargo, apunta que es indispensable el mantenimiento constante por parte de las autoridades encargadas del funcionamiento del espacio.
«El Paseo Los Próceres es uno de los pocos lugares verdes donde se puede caminar en la ciudad y hay que ponerle un poco de cariño», agregó Armas.
La usuaria destacó que muchas baldosas del piso se encuentran levantadas, a algunas máquinas del gimnasio al aire libre ubicado en los jardines del paseo, les falta pintura al igual que las lámparas están defectuosas. Reconoció que muchos de las averías son producto del mal uso de los equipos, pero insiste en que se deben hacer las reparaciones a tiempo.
Con información de: El Universal
Fecha: 18 de enero de 2017