La Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría advirtió este miércoles a la población a no vacunarse con productos ofertados en farmacias y establecimientos privados donde se han aplicado dosis que no cumplen con el registro sanitario del Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel y cuyo expendio no ha sido autorizado por el Ministerio de Salud.

De acuerdo con denuncias recibidas, la Comisión de Inmunizaciones del gremio informó que se desconoce si los productos aplicados en jornadas de vacunación en farmacias cumplen con el registro del Instituto Nacional de Higiene y con las pautas de cadena de frío para su conservación; incluso no se sabe quiénes son los responsables ni las marcas ni nombres de laboratorios de las vacunas. Señalan que médicos particulares adquieren productos con iguales condiciones que no precisan siquiera fecha de vencimiento.

En un comunicado, alertaron que existen establecimientos en los que se promociona la colocación de vacunas contra hepatitis A, varicela, VPH, neumococo 13, herpes zoster, tetravalente, pentavalente, hexavalente, triple viral y fiebre amarilla, que son vendidas a precios que oscilan entre 3.000 y 7.000 bolívares. “Un producto importado es imposible que se pueda ofrecer a esos costos”, resaltan en el comunicado, en el que advierten que existen vacunas para el neumococo cuya presentación de dosis y etiqueta es fraudulenta. Indican también que las inmunizaciones tienen etiquetas de los ministerios de Salud de Colombia y Brasil y suelen ser ofertadas irresponsablemente a través de las redes sociales.

“Hemos recibido denuncias desde hace dos años porque, en medio de la crisis, hay gente inescrupulosa que se aprovecha para hacer trampas y ofertar productos falsos en medio de la necesidad de las personas por conseguir vacunas. Hemos también denunciado ante el Ministerio de Salud estas irregularidades, pero no hemos recibido respuesta”, indicó el presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría, Huníades Urbina.

El gremio resalta que estas irregulares ocurren por la no asignación de divisas preferenciales por parte del Estado a los laboratorios que manufacturan y distribuyen vacunas al sector público y privado. Los especialistas instan a la población a abstenerse de comprar estas vacunas de procedencia irregular y a los establecimientos de comercializar y distribuir las dosis, pues esta practica acarrea la aplicación de medidas sanitarias y procesos sancionatorios tipificados en el Código Penal.

Fuente: El Pitazo

Fecha: 14 de septiembre de 2017

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