El Hospital Dr. Leopoldo Manrique Terrero, popularmente conocido como el Periférico de Coche, cumplió este mes de mayo seis meses con sus puertas cerradas. Envuelto entre polvo y escombros, para su personal no hay señales de que el centro asistencial vuelva a estar operativo pronto a pesar de que su director asegurara que los trabajos de remodelación estarían terminados en junio.
“Están tumbando el hospital por todas las fachadas. Aquí no hay nadie que dé la cara. No se ve ningún avance ni hay una valla con el presupuesto que están destinando a las remodelaciones. No hay nada”, afirma Zuleika Pérez, dirigente sindical del centro de salud.
Quienes se encuentran actualmente dentro del centro asistencial son los obreros, los vigilantes y el personal de cocina. El resto de los trabajadores permanecen en sus casas, aún percibiendo un sueldo, a la espera de que los contacten para avisarles que el hospital de Coche reabrió sus puertas.
“El director dijo que ya arreglaron el problema de electricidad. También dijo que arreglarían los quirófanos, pero nadie puede entrar allí. No nos dejan pasar y no podemos ver cómo están avanzando los trabajos. Yo tengo un dolor grande de ver al hospital como está“, lamentó Pérez, quien labora en el área de recursos humanos del centro asistencial.
La dirigente sindical, quien tiene más de 35 años laborando en el Periférico de Coche, indicó que, ante la ausencia de avances en las remodelaciones, los trabajadores temen ser transferidos a otros hospitales.
“Recientemente, al personal de laboratorio le dijeron que los iban a transferir al materno-infantil Hugo Chávez en El Valle. Ese es el miedo que nosotros tenemos: que nos transfieran a todos y que no abran más el hospital”, agregó Pérez.
El Periférico de Coche es un hospital tipo III, especializado en la atención de emergencias médico-quirúrgicas y toxicológicas. Las urgencias que llegan al centro de salud tienen que ser referidas al Hospital Universitario de Caracas, al Periférico de Catia, el hospital de Lídece y los Magallanes de Catia.
Con el cierre del Periférico de Coche, unos 750 trabajadores se han visto afectados.
Con información de Efecto Cocuyo