“A mi mamá le dio un ACV y ha sido un viacrucis correr diariamente para pagar los exámenes en clínicas o laboratorios privados. Durante dos semanas hemos gastado 15 mil bolívares diarios, solo para hacerle el ph”, lamentó Libia Silva, en las afueras del Hospital Universitario de Maracaibo.
Esta prueba de sobrecarga ácida (realizada para determinar qué tan bien controlan los riñones el equilibrio acido básico del cuerpo) “devoró” 210 mil bolívares de esta familia, sin contar lo que gastaron en otros estudios sanguíneos como los electrolitos (sodio, potasio, cloro, calcio, magnesio y fósforo), que cuestan alrededor de Bs. 12 mil.
Otros exámenes que tampoco se encuentran en el “Universitario” son el tiempo de coagulación, que vale 12 mil, el perfil lipídico, que puede salir en 3.500 y el VIH, que ronda los 6.500.
“Los laboratorios ahora solo funcionan para las emergencias y para hospitalización. Ya no hay laboratorio para control de citas; por eso, los pacientes de las consultas deben resolver por fuera los exámenes”, expresó una trabajadora del HUM, quien también reveló que “cuando no hay agua tampoco se procesan las heces ni la orina”.
Por su parte, la coordinadora de un laboratorio privado, ubicado al norte de la ciudad, precisó que los reactivos para los marcadores tumorales (para descartar cáncer) son muy difíciles de conseguir y, cuando se compran, tardan mucho en llegar. Esta evaluación estaba en 17.180 en enero de 2016, pero ahora está en 71.710, lo que representa un incremento de 417%.
“El amonio, el ph, los gases venosos y los niveles de anticonvulsivos en sangre no los tenemos disponibles desde hace meses. Pero la situación es crítica en los hospitales y clínicas. Ayer nos llegó una persona de un centro privado porque no tenían ni hematología ni orina”, aseguró.
Otro de los estudios que se disparó es la rutina hepática, que en un año se elevó 654%, pasando de 3.155 a 20.640 bolívares.
Los precios de los exámenes varían casi a diario. Yajaira Quintero necesitaba hace cinco meses 20 mil bolívares para cubrir algunos exámenes de rutina, hormonales y marcadores tumorales, sin embargo, la suma ascendió a 107.835 bolívares. “Dios quiera que consiga el dinero”, exclama con preocupación.
A Neraldín Gauna también le quita el sueño la angustia, pues necesita 14 mil bolívares, que no tiene, para el control de embarazo: orina, VIH, Vdrl y toxoplasmosis. “Vengo de varios hospitales y no hay nada. En el ‘Chiquinquirá’ me dijeron que me fuera a un sitio privado”, reclama la joven de 24 años.
Mientras que María Pérez, de 19 años, aguardaba en una sala de espera con la factura de 135.175 bolívares por un perfil rutinario y hormonal. “No sé cómo hará una persona pobre para llegar a un diagnóstico”, manifestó.
Del lado de los laboratorios las quejas también abundan. “Esto es un mercado sin techo; los precios se disparan todos los días. Por ejemplo, cada caja de detergente o diluyente para hacer hematologías nos salía en 40 mil, en diciembre, y ahora está en 254 mil. Hace un año estaba en 4 mil”, denunció Raúl García, bioanalista y dueño de un laboratorio al sur de la capital zuliana.
Detalló que una garrafa de 3,8 litros de lisante, también empleado para hematologías, subió a 1 millón 500 mil. “Los tres componentes (por caja) nos alcanzan para entre 400 y 500 pruebas”, explicó.
También refirió que, en 2016, los reactivos para los perfiles hormonales, estaban en 30 mil “y eso era muy caro”, pero ahora sobrepasan los 700 mil. Permiten practicar solo 70 o 75 pruebas, sin tomar en cuenta las que pierden por repetición. Lo mismo sucede con el TGO (transaminasas) que saltaron de 36 mil a 137 mil, en unas semanas.
Desde hace un año, García descartó de sus servicios la evaluación de insulina por falta del reactivo. La situación se repite en otro laboratorio de Los Haticos, donde llevan el mismo tiempo sin procesar los electrolitos, las hormonas, la hemoglobina glicosilada, según informó la bioanalista María Agreda.
“Es muy lamentable que la gente ya no se realice sus chequeos completos. Ahora se hacen todo por parte o solo los más importantes”, comentó la especialista.
Con información de: La Patilla
Fecha: 06 de marzo de 2017