Las universidades autónomas del país avizoran un panorama de crisis para el 2015, pues por noveno año consecutivo reciben un presupuesto deficitario que no corresponde a sus necesidades financieras.
Esta situación ha producido el sacrifico de aspectos como la investigación, el desarrollo docente, la actualización tecnológica y el crecimiento de planta física. En promedio, cada casa de estudio recibió un 35% de lo solicitado para el próximo ejercicio fiscal, lo cual presagia la reiteración de conflictos nacionales en la educación superior.
Los montos asignados a duras penas permitirán la cobertura parcial de las necesidades mínimas de las casas de estudio. En la mayoría de los casos, no alcanzan para pagar los sueldos y beneficios sociales durante todo el año. En tal sentido, los directivos deben ingeniárselas para administrar el dinero, partiendo desde un presupuesto ordinario limitado y finalizando con una compensación mediante créditos adicionales.
Esta situación de crisis muestra el inminente riesgo de protesta por parte de gremios profesionales, por cuanto exigirán su justa remuneración acorde a lo estipulado en su contrato de Ley; así como también el descontento de estudiantes, quienes esperan que sus providencias se mantengan ininterrumpidamente y sin contratiempos.
El altisonante anuncio del Presidente de la República con la fusión del ministerio de Educación Universitaria con el ministerio de Ciencia y Tecnología, no generó ningún tipo de cambios positivos en las academias, incluso, no se aportaron recursos para la actualización tecnológica.
En tal sentido, EL IMPULSO realizó una investigación en las tres universidades más importantes de la región y en la academia con mayor prestigio a nivel nacional, en función de conocer el juicio de valor de sus rectores, quienes enfrentan duro escollos para mantener la excelencia académica pese a no contar con el total respaldo del Gobierno Nacional.
UCLA: El peor porcentaje en los últimos años
La Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), registró el peor porcentaje de aprobación de recursos en los últimos siete años, produciendo un desequilibrio económico nunca antes experimentado por las autoridades universitarias. El 34,4% de la cuota adjudicada apenas alcanza para la cobertura parcial de los servicios.
En tal sentido, la academia se decantó por ajustar algunas variables presupuestarias, acortando drásticamente el dinero de su Ejercicio Fiscal 2015.
De acuerdo a sus necesidades actuales y adaptando las cifras al índice inflacionario del país, la UCLA elaboró un anteproyecto donde calcularon un requerimiento de 3.055.550.973 millones, pero la respuesta del ministerio giró en torno a la aprobación de 1.051.119.591 millones.
Estos recursos cubren el funcionamiento de la institución a lo largo de siete meses durante el ejercicio 2015, quedando por fuera cinco meses sin recursos para gastos académicos, servicios básicos y funcionamiento operativo.
Francesco Leone, rector de la UCLA, señaló que “esta es una acción premeditada para ir socavando las bases de las universidades autónomas. Este déficit es muestra de un gobierno irresponsable que no tiene como prioridad el crecimiento de sus ciudadanos mediante la educación”.
UPEL: Educación sin incentivos para crecer
El funcionamiento y crecimiento de los programas académicos de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, tendrá por quinto año consecutivo crisis presupuestaria, lo que genera una importante insuficiencia para marchar de forma óptima.
Sus estimaciones, arrojaron una necesidad de 4.554.236.037 millones; no obstante, el Estado realizó un aporte fiscal de 2.109.601.490. La autorización representa un 46% de lo exigido por la academia. Estos recursos deben ser distribuidos en los 8 núcleos pedagógicos del país.
Estos recursos garantizan durante 6 meses: gastos de mantenimiento, providencias estudiantiles, atención de matrícula de estudiantes de pregrado, el financiamiento de proyectos de investigación y la atención de los usuarios en bibliotecas, laboratorios y bioterios.
Sin embargo no garantiza: bono navideño, bono doctor para docentes, el segundo semestre de aportes para las guarderías, la estimación del costo tanto en el gasto de personal como en el gasto de funcionamiento y providencias estudiantiles.
Nelson Silva, director decano del Instituto Pedagógico de Barquisimeto (UPEL – IPB), declaró que han apostado a la creatividad para subsanar los gastos.
“Hemos solicitado aportes de la gobernación, de Corpolara y la alcaldía, pues tenemos un majestuoso edifico de 45 años que necesita mantenimiento preventivo y correctivo”.
Unexpo: Faltan recursos para su actualización
“La actualización tecnológica es primordial para la educación politécnica, la cual fomenta su formación mediante la investigación y las prácticas académicas. No obstante, la Universidad Nacional Experimental Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo) no cuenta con los recursos suficientes para adquirir equipos que correspondan con las últimas tendencias educativas.
Esta academia registró una cuota presupuestaria del 22,8%, ubicándose entre las más bajas del país. El monto aprobado para sus tres núcleos de formación fue de 761.195.254 millones, cifra que dista de la realidad de la casa de estudio que esperaba recibir 3.333.109.375 millones.
Amael Castellano vicerrector de Unexpo – Barquisimeto, informó que los recursos no incluyen cuatro meses de salario (Desde septiembre hasta diciembre), totalidad de bonos vacacionales y navideños, siete meses de transporte estudiantil, seis meses de comedor estudiantil, nueve meses de gastos de funcionamiento y la inversión de la infraestructura física.
Por su parte, la rectora Rita Áñez reconoció que han apelado a la creatividad para mantener las exigencias académicas.
“Desde el 2009 trabajamos con un presupuesto ordinario y otro que se complementa a través de créditos adicionales. Si bien se logran cancelar los compromisos laborales, no podemos hacer aportes a la infraestructura y la investigación. Estar en esta crisis es como utilizar una tarjeta de crédito, vas pagando los consumos pero las deudas persisten”.
UCV: Patrimonio mundial en riesgo
La Universidad Central de Venezuela (UCV), principal casa de educación universitaria del país y Patrimonio Mundial de la Humanidad, no escapa de la deficiencia presupuestaria.
A mediados de año, la academia realizó un anteproyecto donde estimaban un cálculo de 8.062.809.275 millones para cubrir todas sus necesidades para el año 2015; sin embargo, el ministerio sólo aprobó 3.144.247.239 millones. Dichas cifras representan un 39% de lo solicitado por la institución.
De los recursos adjudicados, el 80% está destinado para el pago de salarios de los trabajadores, mientras que el 17% será aportado para los gastos académicos.
El 3% restante, se divide en gastos de funcionamiento (pago de servicios básicos, papelería, vigilancia) y mantenimiento de la infraestructura.
“Nuestro complejo universitario es patrimonio mundial y apenas contamos con menos del 3% para el mantenimiento de la infraestructura. Nos encontramos en uno de los peores momentos de la historia, donde en los últimos años hemos estado estancados, sin poder generar crecimiento”, declaró Cecilia García Arocha, rectora de la UCV.
“Nuestras academias sólo son pagaderas de sueldo. No hay dinero para la investigación, la cultura y el deporte”, acotó.
FUENTE: EL IMPULSO
FECHA: 17 DE OCTUBRE, 2016