Construir se ha convertido en “un dolor de cabeza” para Leticia Olivero. Según contó, lleva semanas buscando sacos de cemento y nos los halla “ni barato, ni caro”.
Dijo que ha recorrido muchos establecimientos y no ha conseguido el polvillo para continuar la ampliación de su vivienda.
Denunció que ha conocido de “bachaqueros” que ofrecen la bolsa en 2 mil bolívares “y hasta más”, pese a que su costo regulado es de Bs 70.
“No lo puedo comprar a ese precio, porque el dinero no me alcanzaría ni para la mitad de lo que necesito”.
El comerciante David Zambrano comentó que tiene meses sin recibir “lo poquito que llegaba” de cemento. Recordó que desde la nacionalización de Cemex, en 2011, la distribución empezó a fallar.
“El año pasado todavía nos llegaba de tiempo en tiempo, pero esta vez no hemos visto nada”.
El secretario general del Sindicato de Trabajadores del Cemento y sus Similares, Luis Chaparro, informó que bajó la producción en la planta de Pertigalete en Guanta.
Comentó que actualmente se ubica por debajo de 50%, como consecuencia de la falta de mantenimiento de las instalaciones.
Según explicó, las plantas están trabajando a media porque no han recibido la inversión necesaria para que estén en óptimas condiciones.
Las condiciones de la planta cementera son consecuencia de la falta de inversión. No han destinado recursos para las mejoras de las instalaciones por lo que no están en su mejor condición”.
Recordó que la fábrica tienen capacidad para generar 3 millones 200 mil toneladas de cemento al año, pero “por los pasos que vamos, no llegaremos ni a la mitad”.
Recordó que el año pasado, como resultado de la misma desinversión y la no ejecución de las paradas de mantenimiento, apenas produjeron un millón 500 mil sacos de cemento.
Chaparro señaló que la mayoría del inventario de Pertigalete está siendo destinado a la Gran Misión Vivienda Venezuela (Gmvv) y un “mínimo” porcentaje es dirigido al sector privado.
Sin mantenimiento
El directivo sindical mencionó que no han arrancado la parada de planta 2 programada para marzo, porque la empresa se encuentra a la espera de los electrofiltros.
Aseguró que pese a las condiciones de las instalaciones siguen produciendo de forma continua, pero sin alcanzar las proyecciones.
“Los trabajadores, desde hace un tiempo, venimos alertando sobre la necesidad de inyectar recursos para modernizar la maquinaria, pero lamentablemente no hemos sido escuchados”.
Denunció que por las condiciones de las plantas, el número de accidentes laborales se ha elevado en más de 50%.
FUENTE: EL TIEMPO
Ir a la barra de herramientas