Los constantes apagones y bajas de voltaje se han convertido en un grave problema para los productores agropecuarios del estado Barinas. El presidente de la Asociación de Productores Rurales del Estado Barinas (Asobarinas), José Labrador informó que la producción de leche y ganado se ve afectada por la falta de electricidad, de gasolina y de agua para realizar las labores propias del campo.
En una consulta realizada por el vocero del gremio agrícola reconoció que “hacen de tripas corazones” para solventar las fallas de electricidad, no obstante, la gasolina o el gasoil, combustibles con los que pueden suplir por algunas horas el fluido eléctrico, tampoco lo consiguen y pierden días de trabajo haciendo filas para proveerse de ambos carburantes que a los municipios foráneos llegan cada dos o tres días.
“Usted se va para un pueblo de cualquier municipio de Barinas y observa a productores pequeños, medianos y grandes haciendo colas con sus motos o vehículos para poder llenar los tanques o bidones que les permitan poner a funcionar las plantas y con eso garantizar la cadena de frío en el caso de la leche y derivados lácteos, o del riego de los potreros para proveerle comida y agua al rebaño”, comentó Labrador.
Agregó que la situación está difícil porque no hay electricidad, o su suministro es muy deficiente, escasea la gasolina y también el agua producto de la sequía propia de la época. “Todo se pone cuesta arriba porque en el verano la producción cae por falta de forraje, pero ahora está peor”, se lamentó Labrador.
El representante del gremio de los productores agropecuarios en Barinas desconoce una explicación oficial de lo que ocurre con los cortes eléctricos. “Ya no hay forma de enterarse porque ni siquiera periódicos hay”, afirmó.
Bioanalistas complicados
La presidenta del Colegio de Bioanalistas del estado llanero, Alexa Contreras, dijo que la situación de sus colegas con los constantes apagones les ha complicado el trabajo. Muchos de los 30 laboratorios que hay en la ciudad capital, no han vuelto a abrir hasta que se regularice la situación, ya que no poseen plantas eléctricas para suplir el servicio.
Explicó que quienes tienen sus laboratorios en el circuito que suministra electricidad al hospital no tienen problemas, no obstante, otros de sus colegas tienen sus locales en sitios donde los cortes de luz eléctrica ocurren cada tres o cuatro horas, lo que les imposibilita trabajar con normalidad, pese a que intentaron laborar con un horario especial.
Contreras reconoció que en algunos laboratorios han tenido que comprar plantas eléctricas para trabajar con mediana normalidad, pero que los últimos cinco años, la crisis en general del país, ha originado que al menos 50 laboratorios en Barinas cerrarán definitivamente.
Con información de El Pitazo