El Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) registró 708 protestas durante el mes de septiembre de 2019, equivalente a un promedio de 24 diarias. Esta cifra representa una disminución del 28% en comparación con el mismo período del año pasado.
El observatorio informó que 69% de las protestas (485) fue para exigir derechos económicos, sociales, culturales y ambientales, vinculados principalmente con exigencias laborales, acceso a servicios públicos de calidad, educación, salud y alimentos. El 31% de las protestas restantes (223) se corresponde a los derechos civiles y políticos, que incluyen a grupos políticos opositores y a los simpatizantes del régimen de Maduro.
Además de otros actores de la sociedad que demandan derechos civiles como justicia, seguridad ciudadana y derecho a la vida. De las 708 protestas documentadas en septiembre, 272 fueron combinadas, es decir, se exigieron distintos derechos simultáneamente. En términos porcentuales esta modalidad de protestas representó el 38% del total registrado.
Distribución geográfica de las protestas
Distrito Capital lideró las protestas durante el mes pasado con 64 de las 708 reportadas en todo el país. Le siguieron los estados Anzoátegui (61), Mérida (61), Zulia (60); Bolívar (52) y Miranda (52). La exigencia de derechos ciudadanos no es solo de una región, ocurre en todo el país. Quienes se han quedado en Venezuela no lo hacen de brazos cruzados, sino que han sido persistentes en exigir vivir con dignidad, en libertad y democracia.
La situación que enfrentan los trabajadores fue el detonante de la conflictividad en septiembre. El OVCS documentó 258 protestas relacionadas con exigencias laborales, equivalentes a nueve diarias, para exigir mejoras salariales, seguros médicos y respeto a los contratos colectivos. Desde mayo hasta septiembre de 2019 el salario mínimo fue de Bs 40.000.
En vista de la espiral inflacionaria y dolarización de la economía, esta cifra representa hoy en día apenas dos (2) dólares mensuales, de acuerdo con el cambio oficial establecido por el Banco Central de Venezuela. Los trabajadores del sector educativo llevan la bandera de las protestas laborales. Desde educación básica, secundaria y etapa universitaria, este gremio ha salido a ejercer acciones de calle para llamar la atención de las autoridades frente a la situación que enfrentan por los bajos salarios y colapso de los servicios.
Colapso de los servicios básicos
El acceso deficitario de los servicios básicos continúa afectando la calidad de vida de los venezolanos. La falta de agua, electricidad, gas, combustible y transporte público se han convertido en otro de los obstáculos que han tenido que enfrentar quienes viven en el país. La demanda de estos derechos representó 245 protestas, según documentó el OVCS en septiembre.
La exigencia de agua potable es la principal motivación para las movilizaciones en distintas comunidades del país, contabilizando para septiembre al menos 118 protestas, equivalentes a 4 diarias. También se documentaron aproximadamente 99 protestas, equivalentes a 3 diarias por reclamos relativos al servicio eléctrico.
Con información de El Estimulo