Varios usuarios no contaban con información a la mano sobre cuáles eran los terminales de cédula que Sudeban estableció para que la banca atendiera a sus clientes. Para este lunes correspondían los 0, 1, 2, 3 y 4. Las preguntas sobre este asunto fueron repetitivas en las entradas de las agencias.
Caracas. Una cola de un poco más de cuarenta personas, la mayoría adultos mayores, esperaban en la puerta del banco Fondo Común en Santa Mónica desde las 7:00 a. m. La pauta marcaba que a partir de las 9:00 a. m. de este lunes abrirían una parte de las oficinas del sector bancario organizadas por la Sudeban. Pasaron las horas y nunca llegó nadie. Ni un trabajador, ni un vigilante.
“Tenía 20.000 bolívares guardados para que cuando abrieran los bancos me pudiera mover y así sacar más efectivo”, dijo Julián López, vecino de El Cementerio que se acercó a esta sede de Fondo Común y se fue con las manos vacías. Sin más efectivo, y gastó el poco que le quedaba. “Se me fue en nada, me voy más limpio”, lamentó.
A las 9:00 a. m. no había novedad. Nadie había llegado. La tensión comenzó a aumentar. “¿Será que no van a abrir?”, se cuestionaban los clientes. La mayoría de los adultos mayores estaban con su tapabocas, ropa cómoda, conversaban entre sí, pero tratando de mantener cierta distancia. Muchos buscaban un muro para sentarse o se recostaban en las vitrinas que mostraban las luces apagadas de la agencia.
“Juegan con nosotros. Hacen con nosotros lo que les da la gana”, dijo Julián con tono triste.
Mientras unos llegaban, otros se iban resignados por no poder sacar dinero. “¿Y esto no han abierto?”, se preguntaban cuando se acercaban y veían la oficina cerrada. Se repetía el gesto de agarrarse la cabeza con las dos manos como si no lo pudieran creer. “Venimos caminando desde la avenida Roosevelt para nada”, dijo una señora mayor.
La mayoría de los clientes en las entidades bancarias eran de la tercera edad. Desde hace tres meses esta población no ha podido cobrar en efectivo el monto correspondiente a la pensión. Algunos no poseen tarjeta de débito o prefieren manejarse con el dinero en efectivo para comprar alimentos más económicos en mercados municipales.
El sector bancario se sumó este 1° de junio al plan de flexibilización 5×10 anunciado por el mandatario Nicolás Maduro, que establecería una “nueva normalidad”: cinco días de trabajo y 10 días de cuarentena absoluta. El horario de atención para el sector bancario es de 9:00 a. m. a 1:00 p. m.
La Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario (Sudeban) complementó la información con una circular en la que dividió en dos grupos las entidades financieras que trabajarán lunes y miércoles, y otras, martes y jueves. Los viernes será solo para atención a personas jurídicas.
De cinco agencias bancarias que debían abrir este lunes en Santa Mónica solo estaba trabajando el Banco de Venezuela, que entregaba 50.000 bolívares. “Los están dando en el papelito ese que nadie acepta”, se refirió un señor a los billetes de 200 bolívares.
En la cola se escuchaba la misma queja: “¿Por qué si van a abrir los bancos no los surten primero de efectivo y garantizan que los trabajadores puedan llegar?”
En el Banco de Venezuela no había distanciamiento social, estaban todos pegados. Al momento de entrar al banco les echaban gel antibacterial. La mayoría de las personas que estaban en la cola esperaban que llegaran remesas con billetes de mayor denominación. Nadie sabía cuándo llegarían, solo esperaban.
En otras oficinas como la del banco Provincial tampoco llegó nadie. Todo estaba apagado. En el BOD había personal, pero no podían atender porque no tenían línea. En el caso de Banesco, un vigilante aseguró que estaba cerrada por vandalismo y los clientes podían dirigirse a la sede en Los Chaguaramos.
“Mañana iré al Mercantil a ver si ahí sí puedo sacar efectivo. Y si no, otros diez días más sin dinero”, dijo Elena Gutiérrez al retirarse del banco Fondo Común.
Colas en el centro de Caracas
En el centro de la ciudad se observó una situación similar. En recorrido realizado por Crónica.Uno se pudo constatar que en dos sedes del Banco de Venezuela las colas eran moderadas. La mayoría de personas que ocupaban filas eran adultos mayores, quienes esperaron desde las 6:00 a. m. para ser los primeros en ingresar en las entidades.
La atención se hace a puertas cerradas y con ingreso de pocos usuarios a las instalaciones. Algunas personas dijeron que estaban impacientes por retirar dinero, pues tenían los bolsillos vacíos. Sin embargo, el personal de seguridad informó que no iban a dar efectivo.
La cuarentena decretada a mediados de marzo paralizó por completo la atención presencial en el sector bancario, por lo que se tuvo que migrar a los canales electrónicos ante la imposibilidad de acudir a las agencias para retirar dinero o solventar requerimientos.
Yo vengo porque tengo la tarjeta bloqueada desde hace tiempo, pero realmente lo que uno quiere es dinero. Vine para acá y nos dijeron que no hay efectivo. Toda la cuarentena la soportamos sin un bolívar y ahora quieren que no cobremos nada, y de paso sin pasaje. De verdad que esto es insólito”, expresó Carmen Lozada, quien estaba en cola para entrar al Banco de Venezuela.
En la sede principal del Banco Provincial, ubicado en La Candelaria, también se observó una extensa cola que llegaba casi hasta la Cruz Roja, donde no se respetó el distanciamiento físico. Vigilantes aseguraron que sí darían dinero en efectivo, pero, hasta las 9:40 a. m., aún no daban acceso al público.
Usuarios expresaron que hacía falta asistir a los bancos a hacer trámites que son estrictamente presenciales, como reposición de claves y tarjetas.
Se notó que varios usuarios no contaban con información a la mano sobre cuáles eran los terminales de cédulas que atenderían este lunes, que según Sudeban le correspondía a los 0, 1, 2, 3 y 4. Las preguntas en las entradas de las agencias fueron repetitivas sobre este asunto.
“Estamos limpios”, se escuchó decir frente a Banesco, en la avenida Urdaneta, mientras se aglomeraban algunas personas en la entrada para pedir información. En esta sede había dos colas: una para consultar saldo en los cajeros automáticos y otra para atención al cliente y retiro de efectivo por taquilla. El personal de seguridad comunicó que se pagarían 100.000 bolívares para los pensionados y Bs. 50.000 para los demás usuarios.
Además, pese a que la resolución del Banco Mercantil establece que la institución abra los martes, frente la sede principal se registraron largas colas de usuarios este lunes en horas de la mañana.
Con información de Crónica Uno