Las kilométricas colas de vehículos de hasta cinco días en las estaciones de servicio en Lara por gasolina, han reaparecido y se replican en todo el país. Expertos petroleros alegan que el Gobierno «restringe» este combustible, para destinar el crudo de petróleo a refinar más gasoil y diesel, ante el temor que arrecien las protestas y se paralice la siembra del ciclo de invierno, donde se cultiva maíz y arroz, rubros que son la base de la alimentación venezolana. Así como las actividades de la agroindustria.
«El Gobierno está tratando de no adelantar el proceso para producir gasolina, en vista que lo que tiene es un déficit de gasoil en la temporada de siembra. Sacrifican la producción de gasolina para producir más gasoil. Es decir, están desvistiendo un santo para vestir otro», indicó José Toro Hardy, exdirector de PDVSA.
Cuando el petróleo es llevado a una refinería, pasa por torres de fraccionamiento y craqueo para someterse a un proceso de calentamiento. En una primera etapa lo que se produce es aceites, lubricantes y fibras para la industria textil. Luego los vapores que salen de ese proceso de calentamiento son recogidos, condensados y sometidos a un segundo proceso de recalentamiento, donde se produce el fuel oil; en un tercer proceso de recalentamiento se produce el gasoil. En la siguiente etapa de recalentamiento de los líquidos se genera nafta y gasolina. «El problema es que aunque están tratando de producir más gasoil el déficit se mantiene», reveló.
Asegura que el daño en PDVSA es estructural, son dos décadas sin inversión. «Hay refinerías que se les ha aplicado mal mantenimiento porque no tienen el personal suficiente ni la meritocracia requerida. Hugo Chávez en 2002 y 2003 acabó con 300 mil años de experiencia acumulada en la industria petrolera, al despedir a más de 20 mil trabajadores» recordó.
Asegura que las refinerías funcionan al mínimo de su capacidad. «Estaba operando la refinería El Palito, en Puerto Cabello, estado Carabobo. Estaba produciendo cerca de 25 mil barriles diarios de gasolina, cuando trataron de aumentar la producción empezaron los problemas de vibración, de derrames, conatos de incendio y tuvieron que paralizarla. Lo mismo está ocurriendo en las refinerías Cardón, en Falcón y Puerto La Cruz, en el estado Anzoátegui. Cada uno produce cerca de 25 mil barriles de crudo aproximadamente», comunicó.
El economista petrolero Rafael Quiroz, indicó que al problema se le suma que Venezuela registra fallas en el suministro de combustible. «En los ocho llenaderos que hay en el país, está afectada la flota de cisternas que permiten transportar el combustible hasta las bombas. También hay un problema de inventario, hay varios tanqueros y supertanqueros que están fondeando en altamar, utilizados como almacenamiento para crudo y derivados», informó.
Resaltó que la producción de PDVSA es 675 mil barriles de petróleo diarios, pero escasamente están llegando a las refinerías 93 mil barriles diarios para producir subproductos del petróleo, como diesel, gasoil y gasolina. «El país requiere como mínimo 200 mil barriles de combustible al día para mover el parque automotor y agrícola», comunicó.
Nelson Hernández, especialista en materia energética, informó que la escasez comenzó en 2010, cuando el Estado tuvo que importar ambos combustibles para cubrir la demanda nacional. «El déficit se paliaba con importación, pero estas actividades cayeron por la perdida del crédito internacional de PDVSA, la escasez de divisas por la caída de las exportaciones de crudo y por las sanciones internacionales desde 2018», mencionó.
Corrupción
Según Iván Freites, secretario general del Sindicato de Trabajadores Petroleros Y Gasíferos de Falcón, el racionamiento que hay en el país tanto de diesel como de gasolina es impulsado las «mafias internas», que controlan PDVSA.
«El Gobierno sigue privilegiando a Cuba por encima de las necesidades de los venezolanos. Este país se lleva 30 mil barriles diarios de diesel, de los 50 mil que produce PDVSA. Lo que queda es administrado y comercializado por los militares que están dentro de las instalaciones petroleras. El régimen ha creado corporaciones del contrabando porque el litro de diesel cuesta 00000,25 bolívares. Prefieren tirarlo al mercado negro donde ciudadanos llegan a pagar de dos a cuatro dólares el litro», denunció.
El representante gremial sostiene que por estos hechos de corrupción y la falta de información del Gobierno sobre PDVSA, se desconoce cuánto combustible está llegando a los estados del interior del país, porque Caracas, sigue siendo privilegiada con suministro continuo.
Afirmó que del 15 de marzo y hasta los primeros días de abril, PDVSA logró tener activas las plantas de Cardón, El Palito y Puerto La Cruz, produciendo 300 mil barriles diarios de gasolina, aproximadamente.
Se caen a pedazos
José Bodas, secretario de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela, informó que desde 2010 la crisis de las refinerías del país se agudizó. «Venezuela es dependiente de la importación de combustible, a pesar de que en el pasado fue uno de los mayores exportadores del mundo», expresó.
Mencionó que la Refinería El Palito en Carabobo, está paralizada, su capacidad instalada es para producir 120 mil barriles diarios de gasolina. El Complejo Refinador de Paraguaná (RCP), que integra las refinerías Amuay, Cardón y Bajo Grande en Zulia, el más grande de Latinoamérica, tiene una capacidad instalada de 950 mil barriles diarios de gasolina, pero sólo está operativa Cardón al 15% de su capacidad. La refinería de Puerto La Cruz en Anzoátegui, debe permanecer ocho días paralizada porque está recibiendo mantenimiento, debido a una fuga en la línea de producción principal. Bodas afirmó que esta refinería estuvo cuatro años paralizada y arrancó este año, sin embargo no le funciona la planta de craqueo catalítica ni la planta de alquilación.
Con información de La Prensa de Lara