Si tuviéramos insumos, es factible cumplir las metas, pero no hay insumos suficientes para sacar esa cifra en el corto plazo”, sostiene el delegado de la Acería de Palanquillas de la Siderúrgica del Orinoco Alfredo Maneiro (Sidor), Carlos Ramírez, respecto a las ya reducidas metas de producción del último cuatrimestre del 2016, planteadas por el presidente de la acería, Justo Noguera Pietri.
La industria, reestatizada en el 2008 por orden del expresidente Hugo Chávez, era una taza de oro desde el punto de vista industrial hace décadas. Pujante, como ninguna en América Latina, tuvo presencia siderúrgica en la región y dio impulso al conglomerado industrial en Ciudad Guayana. Era el perfecto ejemplo del sueño de convertir a Guayana en el polo de desarrollo no petrolero, en la fuente de divisas para impulsar al país al margen del estilo monoproductor que siempre lo ha caracterizado, dependiente cada vez más de la renta petrolera.
Luego del pico de producción de 4,3 millones de toneladas de acero líquido en 2007, vino la reestatización y la caída progresiva de la producción.
En el primer semestre de 2016, con la sombra del racionamiento eléctrico, el ritmo se detuvo. De allí que entre enero y agosto de 2016 se haya producido apenas 96.254 toneladas de acero, que equivalen a 9,5% de la meta para ese periodo, que se ubicaba en poco más de un millón de toneladas de acero.
La cifra es ínfima, pues representa apenas ocho días de la producción que en 2007 registraba la siderúrgica, en manos de la trasnacional Ternium.
Con el año en la recta final, las expectativas han cambiado y la meta mensual se ubica en 100 mil toneladas de acero, mientras que la meta anual se ha reducido a una penosa cifra de 600 mil toneladas de acero al cierre del 2016. Varios trabajadores de la acería coinciden en que la planta no alcanzará esa cifra.
Las etapas 4 y 5 están ligadas a la reactivación productiva de la línea “A” de Planta de Pellas, la culminación del proyecto HyL 3 y la ejecución de reparaciones extraordinarias en las plantas Midrex. La última fase contempla tener a máxima capacidad los seis hornos de la acería.
11,3% del récord de producción mensual de cabillas
En los ambiciosos detalles del plan de recuperación de Sidor, la estatal ha celebrado que en el período de mayo a septiembre del año en curso, la producción de cabillas se ubicó en 14 mil toneladas; la mayoría, destinadas a la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV).
La cifra, que ha sido tomada como título en portales de noticias con tendencia oficialista, equivale a una producción de 3.500 toneladas de cabillas al mes, apenas un 11,3% de la máxima producción de barras alcanzada en la historia de Sidor.
Esta se logró en 2007, cuando la industria logró producir 371 mil toneladas de barras al cierre del año, una cifra ligeramente inferior a la capacidad de diseño de esta área, que se ubica en 390 mil toneladas al año.
Cuando la estatal difundió las cifras, el tren de barras de la acería operaba. Sin embargo, un trabajador del área, que prefirió no identificarse, comentó que estiman paralizar la producción a más tardar este miércoles por la falta de palanquillas y cal.
“El material para barras se acaba hoy (lunes) y se estima que la Acería de Palanquillas arranque el 3 de octubre”, asomó, lo que sugiere que el área estaría paralizada más de una semana y media.
Para los trabajadores, la falta de insumos sigue determinando la operación interrumpida de Sidor. “En las condiciones que está actualmente la empresa no es alcanzable la meta de 100 mil toneladas al mes. Por ejemplo, la Acería de Planchones, que es la que está trabajando actualmente, lleva acumulado 20 mil toneladas en el mes”, apuntó un trabajador, que también optó por mantener su nombre en reserva, por temor a represalias.
“Hoy adolecemos de insumos, repuestos y falta de actualización tecnológica, eso sin contar los muchos profesionales que se han ido de Sidor buscando otros derroteros”, añadió.
Ramírez explicó que la falta de cal impide mantener activas las dos acerías. “De los dos hornos en planta de cal, hay uno fuera de servicio y el otro funciona a medio tren. No hay suficiente cal y faltan ladrillos refractarios”.
Los puntos críticos han sido definidos y difundidos, no solo en el caso de las acerías, sino también en la Planta de Cal por fallas en el motor, refractarios e, incluso, déficit de cauchos para las volquetas de traslado del insumo.
La realidad y el panorama en el corto plazo sigue siendo una puerta abierta al acero importado.
Sin precisión de inversiones
En el caso de Sidor, ninguna autoridad ha difundido con claridad si existe alguna inversión significativa en el corto plazo para reflotar las áreas productivas y cuáles son los puntos prioritarios a atender, pese a las consabidas deficiencias.
En la memoria y cuenta 2015 de la estatal, destacan entre las limitaciones las dificultades para adquirir materias primas e insumos básicos para el proceso productivo “por las demoras en el proceso de liquidación de divisas”, así como el desfase de mantenimientos y reparaciones necesarias que no permitieron alcanzar las metas productivas propuestas.
Durante el período 2015, precisan, se ejecutó solo un monto total de 376,4 millones de bolívares, el equivalente al 9% del monto total de las inversiones presupuestadas para el año.
En la tabla de proyectos a ejecutar en el 2016 se plantearon 18 obras para este año por un monto de Bs. 737 millones, de los cuales se desconoce el monto ejecutado hasta ahora.
FUENTE: CORREO DEL CARONÍ
20/09/16