Los trabajadores del sector salud, en el estado Trujillo, acataron un paro de brazos caídos este miércoles, 16 de octubre. De esta manera lo informó, a las 11:00 am, la presidenta del Colegio de Enfermeras de la región, Sulbia Torrealba, quien se encontraba en la Inspectoría del Trabajo en el municipio Valera.
«Nosotros los trabajadores del sector salud hemos llegado a la necesidad de hacer paros escalonados, de protestar y hoy, a nivel nacional, decirles a los nacionales y a los regionales, que manejan el sector salud, que nosotros nos estamos cansando», expresó Torrealba.
La enfermera detalló que los trabajadores de los hospitales Pedro Emilio Carrillo de Valera, José Vasañlo Cortez de Sucre y Aracelis Álvarez de Rafael Rangel, estaban sumados a la acción para exigir mejores salarios y condiciones de sus instituciones. Todo en miras a un paro de 48 horas, este 22 y 23 de octubre. Fechas que coinciden con la protesta de los docentes.
60 trabajadores
Torrealba denunció la violación a la Constitución, la Ley Orgánica del Trabajo y la Convención Colectiva ante la inspectoría del municipio Valera. Esto debido a las acciones emprendidas por la Fundación Trujillana de la Salud (Fundasalud) en contra de unos 60 trabajadores de la región.
Dentro de este número están contados los 27 profesionales con procedimientos administrativos abiertos, y amenaza de despido, del Hospital Dr. Juan Montezuma Ginnari, del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales. Tres de ellos, detalló Torrealba, actualmente fueron destituidos por dar a conocer las carencias del centro de salud.
«Esto surge a raíz de que en los meses de noviembre, diciembre y enero, nosotros protestamos por las condiciones del seguro social y a unas denuncias, públicas y notorias, de que había autoridades extrayendo medicamentos de dicha institución. Ellos se negaron a investigar», puntualizó la representante del gremio.
En la lista de afectados se incluyen 15 trabajadores con salarios suspendidos del Hospital José Vasallo Cortéz, del municipio Sucre.
«Por qué les suspenden los sueldos, porque protestan, porque muchas veces no pueden ir a trabajar porque no hay transporte, no tienen efectivo y las condiciones de salud son pésimas para dar atención de calidad», concluyó Torrealba.
Con información de El Pitazo