Desde el 11 de junio los transportistas de las líneas urbanas e interurbanas del municipio Campo Elías de Mérida denuncian no recibir gasolina ni gasoil para sus autobuses. Suman más de una semana sin poder trabajar.
En una larga cola por combustible permanecieron este martes, 22 de junio, las unidades de cuatro líneas de transporte público que funcionan en el municipio Campo Elías del estado Mérida. La estación de servicio donde surtirían a los transportistas no había abierto hasta el mediodía.
Alcedo Guerrero, presidente de la línea San Benito, dijo a El Pitazo que las autoridades encargadas de la distribución del combustible los mantienen engañados. Cuando les surten sus vehículos, apenas les alcanza para dos días de trabajo.
“Salimos a trabajar cada 22 días y ya tenemos 12 días sin que nos equipen de combustible las unidades. Después salen las autoridades a decir que somos nosotros los que no queremos trabajar, poniéndonos en contra de las comunidades. Muchos compañeros se han ido a otros estados con sus unidades porque hay mejores condiciones de trabajo que aquí en Mérida”, aseguró Guerrero.
Durante la mañana de este 22 de junio se observó una larga fila de autobuses de las líneas San Benito, Unión, Adelmo Gutiérrez y de la cooperativa Campo Elías.
Usuarios afectados
Mary Quiroz trabaja como doméstica en una casa en Mérida, pero ella vive en Ejido. Lleva dos semanas sin poder ir a trabajar porque no hay transporte público y, aunque podría usar el servicio de Trolebús durante las semanas de flexibilización de la cuarentena, asegura que es casi imposible poder abordar una por la gran cantidad de personas en espera y las limitaciones de usuarios para abordar cada unidad.
“Tres veces perdí el viaje a la parada la semana pasada porque no trabajaron los autobuses. Ellos dicen que es porque no les dan combustible. En una de esas llovió mucho y llegué con malestar a la casa, y pues uno ahora medio tose y la gente cree que es COVID-19. ¿Cómo llego yo a trabajar así?”, dijo Quiroz a El Pitazo.
Por su parte Magaly Hernández, habitante del sector La Pedregosa de Mérida, tuvo que ir a la oficina del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) para renovar su cédula de identidad el pasado jueves 17 de junio. Se trasladó a pie, en un trayecto de más de 7 kilómetros, por la falta de transporte, y debió volver al otro día a retirar su cédula.
“Llegué como a las 10:30 am porque antes aproveché de pasar por farmacias para comprar unas medicinas. Tardé casi dos horas para sacar la cédula, pero luego salió un trabajador a decirnos que debíamos pasar al día siguiente u otro día para retirar la cédula porque ya en Caracas habían cerrado para verificar las huellas. Imagínese, me va a tocar otra vez venirme a pie”, dijo la afectada a El Pitazo.
Otros sectores priorizados afectados
Al igual que los transportistas, otros sectores priorizados como alimentación, sobre todo los productores agrícolas y transportistas de hortalizas, así como Trabajadores del sector salud, pasan incluso meses sin poder poner combustible a sus vehículos.
La escasez de combustible de ha agravado en Mérida desde el pasado mes de marzo. Conductores de vehículos particulares deben hacer colas de hasta dos días para tratar de surtirse en estaciones de servicio dolarizadas. En el mercado negro un litro de gasolina está entre $1,75 y hasta $2,5.
Con información de El Pitazo