La Unidad Democrática exigió este sábado al Consejo Nacional Electoral (CNE) “no tomar atajos” y continuar, sin demoras, el proceso del referendo para revocar el mandato al presidente Nicolás Maduro, pues este sábado se cumple el lapso de cinco días establecido para cuantificar el número de firmas consignadas y, aunque aún faltan cajas por revisar, ya se superó ocho veces la meta de rúbricas establecida por el órgano electoral.

“Después de esta fase, el CNE tiene un día – que esperamos sea este domingo – para decidir cuáles serán los 200 puntos o más en los cuales los electores deberán validar sus firmas, de manera que la semana próxima se pueda activar esta etapa”, informó el alcalde del municipio Sucre, Carlos Ocariz, a las puertas de la sede del CNE ubicada en Fila de Mariches, donde se ha estado realizando el proceso de revisión de las firmas durante esta semana.

Ocariz estuvo acompañado del ingeniero Roberto Picón, coordinador del equipo técnico de la Unidad responsable del proceso para la recolección de las firmas y de los testigos que la oposición ha tenido todos estos días en el CNE, quienes, por cierto, acudieron este sábado al lugar para continuar con el proceso pero no se les permitió el acceso por ser día no laborable.

“El reglamento aprobado el 6 de septiembre de 2007 establece claramente que el CNE tiene cinco días continuos – eso incluye sábados, domingos o feriados – para la verificación de las firmas, las cuales consignamos el pasado lunes 2 de mayo. Hoy estamos a sábado 7 de mayo, hoy se vencen los cinco días que establece ese reglamento en su artículo 10 numeral cinco”, precisó Ocariz.

Cifras oficiales en mano, avaladas tanto por los funcionarios del CNE como por los testigos de la Unidad y del PSUV, Ocariz informó que, además de que hoy se vencen los cinco días reglamentarios, ya se contabilizaron un millón 567.310 firmas contenidas en 70 de las 80 cajas consignadas. “Eso es casi 8 veces la meta del uno por ciento del registro electoral (195.721 firmas) que el mismo CNE estableció”, apuntó.

“Si quieren contar las diez cajas que faltan, bien, pero que eso no sacrifique la continuidad de lo que está establecido en el reglamento, y que dediquen el día de mañana domingo para decidir cuáles serán los puntos para la validación de las firmas, que es la etapa que viene”, insistió.

“Hacemos un llamado a los rectores del CNE: las reglas están para cumplirlas; esas normas no las hizo la oposición sino el mismo árbitro electoral. Nosotros, como venezolanos, esperamos que no cambien las reglas ahora, cuando hay un proceso de revocatorio en pie. La mayoría de las rectoras que están hoy allí sentadas, empezando por su presidenta (Tibisay Lucena), estaba cuando se aprobó ese reglamento. Por lo tanto, exigimos que ese mismo CNE que aprobó ese reglamento, sea el que garantice que se cumpla”, añadió.

“No queremos atajos. Si ya estaban las reglas, entonces cumplamos todos con esas reglas. Y que sea el pueblo, el poder popular, el que decida con su voto. No le tengamos miedo a esas reglas ni a la expresión del pueblo”, insistió.

Aspectos técnicos influyen en lo político

Picón, por su parte, refirió que no se dieron explicaciones de por qué esta sede del CNE no trabajó hoy, salvo que “el cronograma establecido por el directorio no incluía el día sábado. Nosotros, formalmente, solicitamos que se habilitara el sábado como día laborable, y no lo cumplieron. Nos han informado que el proceso se reanudará el lunes”.

Agregó que, cuando hay elecciones, en esa sede del CNE se trabaja 24 horas por siete días en tres líneas de producción que tienen 72 estaciones. “Para este proceso solo se abrió una línea con 24 estaciones, de manera que si se hubiera querido, se habría podido habilitar más personal para hacerlo en menos tiempo”, comentó.

“Queremos hacer un reconocimiento al personal técnico del CNE que ha trabajado durante estos días con nosotros, pues el proceso se ha hecho técnicamente de manera perfecta. Lo que hizo falta es que el directorio hubiera dispuesto mayor cantidad de recursos para cumplir con esta tarea que es prioritaria para el país”, agregó.

Aseguró que los testigos del PSUV han estado presentes en el proceso de los últimos días, pero que ayer viernes sólo acudieron 22 y por eso sólo se pudieron abrir 22 cajas en lugar de 24, como se había venido realizando en los días anteriores. “Nosotros protestamos este hecho, porque los procesos electorales no se detienen por falta de testigos sino por falta de miembros de mesa”, indicó.

Igualmente, refirió que el reglamento establece que por ser el presidente el funcionario público a revocar, el proceso se debe cumplir sobre una circunscripción de carácter nacional. “Eso de recoger el uno por ciento de firmas por estado es una regla que acaba de imponer el CNE”, aseguró.

Asimismo, informó que ayer no hubo reunión del directorio del CNE ni modificación alguna al reglamento de referendo, como lo intentan hacer sus autoridades según lo han denunciado altos voceros de la Unidad.

“Hemos pedido al CNE, por intermedio del rector Luis Emilio Rondón, que se constituya una mesa técnica para que las autoridades electorales compartan con nosotros la información sobre la forma en que se van a cumplir los siguientes pasos del referendo. Para que las cosas se hagan de mutuo acuerdo entre nosotros, que somos el proponente; el CNE, que es el que realiza el proceso, y el PSUV, que es, digamos, la parte afectada. Pero debe ser un proceso abierto”, concluyó.

Ir a la barra de herramientas