La escuela Vuelvan Caras de San Fernando de Apure fue usada como campo de prácticas militares. Miembros de la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora (Crbz) se retrataron dentro de las instalaciones con armas largas, en lo que se vendió como un ejercicio castrense.

Esta información fue publicada por el periodista de Apure, Miguel Cardoza. En su cuenta de Twitter adjuntó una foto a la información. En la gráfica se ve a 17 hombres y mujeres cargando un FAL. Este armamento fue descontinuado en el país, cuando el arma orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb) pasó a ser el AK 103.

“Esas son unas prácticas que están haciendo los de la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora”, dijo a Efecto Cocuyo. Agregó que las mismas se hacen en horario extracurricular, de forma que los alumnos no estén en las instalaciones. La gráfica fue tomada entre el 18 y el 24 de febrero de este año.

Identificó a uno de los fotografiados. El periodista asegura que el hombre con camisa color marrón se trata del constituyente Héctor Orlando Zambrano.

De acuerdo con el seguimiento de Cardoza, el Crbz es una agrupación que pertenece al Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv). Realizan actividades políticas pro gobierno y también se les conoce por su simpatía con las prácticas armadas.

El 20 de febrero, el perfil de Facebook de la Crbz publicó otras fotos de civiles con armas largas. Se repiten las armas largas en estas gráficas.

Legitimación

El Centro Comunitario de Aprendizaje (Cecodap) respondió el mensaje del periodista en la misma red social. “Las instalaciones educativas no pueden ser utilizadas para ejercicios militares con el uso de armas”, indicó la cuenta.

Fernando Pereira, director de Cecodap, llamó la atención sobre la normalización del uso de armas que estas prácticas dejan en la sociedad.

“Se le está dando un ingreso de las armas a las escuelas. Se está legitimando la entrada de las mismas. Aunque sean facsímiles, siguen representando fusiles, armas de guerra con poder letal”, dijo el defensor de los derechos de los niños, niñas y adolescentes.

Pereira recordó los resultados de la última investigación de Cecodap sobre la violencia:

– 1.134 niños, niñas y adolescentes fueron asesinados en 2017.

– 83% de los homicidios de los niños, niñas y adolescentes fueron perpetrados con armas de fuego.

– 89% de las víctimas de homicidios tienen edades comprendidas entre 10 y 17 años de edad.

– La tasa de mortalidad por homicidios de adolescentes entre 15 y 19 años de edad es de 99,7 por cada 100.000 habitantes.

– 1.447 casos revisados se refieren a niños heridos por armas de fuego, robos y extorsiones, secuestros y/o linchamientos.

“En este contexto, lo que necesitamos es alejar las armas de las escuelas y del imaginario de los niños, niñas y adolescentes”, reafirmó.

Con información de Efecto Cocuyo

Ir a la barra de herramientas