Cuando apenas se recupera de la peor falla eléctrica de su historia, ocurrida el 7 de marzo y que duró casi una semana, el país petrolero volvió a quedar a oscuras. Las calles desoladas y los comercios cerrados.
“Es una verdadera desgracia, una crisis humanitaria, aquí se trabaja con las uñas”, se quejó Noe de Souza, de 36 años y dueño de una panadería, de las pocas que estaban abiertas en Caracas para liquidar en dos por uno los últimos productos que le quedaban.
La falla comenzó el lunes a la 1:22 pm y colapsó el suministro de agua, las redes de telefonía e internet y la banca electrónica, vital ante la escasez de efectivo que generan la voraz hiperinflación y la devaluación.
Además de la capital, el corte afectó a 21 de los 23 estados, según reportes de usuarios en redes sociales.
El masivo apagón de una semana afectó con dureza a los hospitales, ya castigados por la falta de insumos y medicinas. Según oenegés, una decena de pacientes murieron a raíz de los cortes.
“Si no vuelve la luz, tenemos el problema de que no nos dializan, al no dializarnos tenemos la posibilidad de perder la vida porque no se nos dializa desde el día sábado”, se lamentó Nelson Rosales, de 80 años, en un hospital de Caracas donde se vivían escenas de verdadero dramatismo.
“Suponte tú que la luz llegue el jueves, ¿Qué pasa si llega el jueves?; nos morimos todos”, advirtió este hombre que está en diálisis desde hace diez años.
“Sabotajes” y “mentiras” –
Los apagones son frecuentes y sistemáticamente el gobierno los atribuye a sabotajes de la oposición.
“Esta guerra eléctrica la derrotaremos con la fuerza inmensa que como pueblo hemos acumulado en nuestra lucha contra imperios groseros y sus lacayos locales”, insistió Jorge Rodríguez.
Pero el líder opositor y jefe del Parlamento Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países, aseguró que el corte se produjo por una “sobrecarga en el sistema de subestaciones”.
“¿Cómo pretenden seguir repitiendo las excusas de la ‘guerra eléctrica’ y el sabotaje? Son mentirosos y corruptos”, denunció en Twitter Guaidó, quien se juramentó el 23 de enero, luego de que el Legislativo declarara “usurpador” a Maduro por considerar que fue reelegido de manera fraudulenta.
“Sin luz, sin plata y sin agua y con Maduro presidente… cómo vamos a estar”, comentó resignado Rafael Sánchez, que caminó dos horas y media para llegar a su trabajo, una pizzería que estaba a oscuras y semicerrada.
Fuerte impacto –
El apagón es un nuevo golpe a la colapsada economía venezolana. Según estimaciones del parlamento opositor y organizaciones gremiales, el corte que paralizó al país del 7 al 14 de marzo provocó pérdidas de mil millones de dólares.
Sufrimos “pérdidas de mercancías, salsas, productos cárnicos, pérdida por todos lados, por donde lo mires son pérdidas que no solo lo paga uno, lo paga el país”, señaló Diderot Buendía, dueño de un restaurante en el barrio acomodado de Altamira (este de Caracas).
Con información de El Estimulo